A Coruña. Años 40. En la oscura España de la postguerra, en plena época de represión y asesinatos, un profesor de francés, homosexual y republicano perseguido y una joven prostituta –convertida tiempo después en una poeta de éxito– cruzan sus vidas, estableciendo una intensa y especial relación a tarvés de la poesía, en una sórdida pensión regentada por una mujer acostumbrada a vivir en la desgracia diaria y cuya máxima preocupación es la situación de su hijo, preso en el Valle de los Caídos. Con la actriz Luma Gómez (Ferrol, 1951) en la piel de este último personaje llega mañana al Pazo da Cultura de Narón –20.00 horas– “Palabras malditas”, la nueva creación de Teatro do Noroeste, creada hace tres décadas por la propia Luma y Eduardo Alonso. El precio de las entradas será de 9,50 euros.
¿Qué destacaría de la obra?
“Palabras malditas” cuenta una parte de nuestra historia reciente, en la postguerra pero aún con los coletazos de la guerra. Los falangistas matando gente, ajustando cuentas.... porque como se sabe durante este período hubo muchos ajustes de cuentas que no eran la guerra propiamente dicha, sino enemistades entre vecinos, acusaciones falsas... y en este contexto se sitúa la obra. Es una historia yo creo que muy hermosa, muy poética, muy intensa y con muchas emociones. Animo al público a que venga a verla, porque van a disfrutar. Además, por otra parte, creo que nunca está de más no olvidarnos de lo que nos pasó recientemente para que no vuelva a ocurrir.
El pasado fin de semana tuvo lugar el estreno de la obra en el Teatro Rosalía de Castro. ¿Cuál ha sido la respuesta del público?
El espectáculo ha gustado muchísimo. Durante los dos días de la función, mucha gente nos comentó que muchas cosas de las que sucedían sobre el escenario les traían a la memoria situaciones que o bien habían vivido, en el caso de los mayores, o bien les habían contado sus familiares. Es una historia de una época que nos toca mucho a todos.
Y basada además en un texto que ha sido galardonado.
Sí. El texto, escrita por Eduardo Alonso, obtuvo el accésit del Premio Nacional de Teatro Lope de Vega en su edición de 2014, uno de los más importantes de España y de Latinoamerica.
¿Quién le acompaña en el reparto?
Los actores Sara Casanovas y Mikel Ínsua, un actor también de la zona de Ferrolterra, de Valdoviño, que lleva muchos años trabajando en Madrid. La música, original para la obra, es de Fernando Alonso, director también del montaje, mientras que la escenografía y vestuario corre a cargo de Paco Conesa.
¿Cómo definiría el momento actual por el que atraviesa el teatro?
Salvo algunas excepciones, en la que se incluye precisamente Narón, en términos generales vive momentos bajos, tanto económicamente como de comprensión por parte de la Administración gallega, que sería la que debería de encargarse con mayor interés. Hoy en día, hacer un espectáculo de cuatro personas es ya una superproducción, cuando mi compañía ha hecho montajes de hasta 14 personas y así. Estamos viviendo momentos bastante malos tanto económicamente como de atención por parte de la Administración.
Tras la parada en Narón, ¿en qué otros escenarios se podrá ver la obra?
En mayo nos vamos a Madrid, donde estaremos un mes en el Teatro Español representando nuestro nuevo montaje. Hasta entonces, ofreceremos por Galicia unas quince funciones. Esperamos además que a partir de las funciones en Madrid empecemos a movernos por el resto del territorio español.