Cuando la enseñanza no es solo cosa de profesores

Son las once de la mañana y en el aula hospitalaria instalada en el Arquitecto Marcide hoy la clase va a ser un tanto diferente. Nueve alumnos del primer curso de Enfermería en el Campus de Ferrol –Javi, Raquel, Manu, Rubén, Sara, Iria, Clara, Cristina y María– fueron ayer los encargados de inaugurar el programa “Aprendemos saúde cos alumnos de Enfermería” de este año. ¿La materia escogida para el pistoletazo de salida? Anatomía.

A través de una serie de diapositivas y juegos elaborados por los propios universitarios, Samuel y Yerai, aprendieron ayer algunos de los secretos que entraña el cuerpo humano, como el sistema nervioso o los cinco sentidos. Y como en toda asignatura que se precie, hubo examen final. Aunque los alumnos se mostraron un poco tímidos al principio, se comprobó la atención que prestaron durante las horas que duró la explicación ya acertaron todas las preguntas a las que fueron sometidos.

“Es una labor más de la enfermería que mucha gente no sabe que podemos hacer; el transmitir cosas a los niños sobre cómo funciona nuestro cuerpo para llevar una vida más saludable... Es muy gratificante”, comenta Manu, al tiempo que indica que esta clase de experiencias les sirven para perder el miedo escénico, “por ejemplo, de cara al trabajo de fin de grado”.

La de ayer fue la primera de las clases programadas hasta finales de mayo, en las que participarán un total de 49 alumnos que se dividirán en seis grupos para tratar diferentes asignaturas.

Con respecto a los juegos, que quedarán en el aula hospitalaria para posteriores usos, Manu explica que les llevó bastante tiempo realizarlos. “Empezamos en Navidad; tuvimos que hacer un trabajo sobre el sistema nervioso para clase y luego lo adaptamos para los niños a través de los juegos”.

Tanto el maestro de Anatomía de la facultad, Avelino Castro, como la profesora del aula, Pilar Porta, valoran muy positivamente esta actividad porque supone un enriquecimiento recíproco. “Este es el tercer año que realizamos el programa y la verdad es que sí que hay diferencias entre el principio y ahora. Como paso previo, voy a la universidad y les doy una pequeña charla al comienzo del curso, para que los chavales sean capaces de desarrollar actividades que se ajusten a las diferentes edades, ya que en una misma clase hay niños de Primaria y Secundaria”.

Tras la actividad, los universitarios deben evaluar su experiencia con una memoria que coja una reflexión final de lo que es, en realidad, su primer contacto con el mundo hospitalario.