El Baxi quiere demostrar quién manda

Por el momento, el Baxi Ferrol ha superado con nota ese complicado tramo de la competición que, en el plazo de tres semanas, lo enfrentaba a los otros tres equipos que, como él, pelean por meterse en la promoción de ascenso. Tras ganar a Construcción Ardoi e Ibaizabal –también al Maristas–, el cuadro departamental se ve las caras ahora con el Celta Zorka.

El tercero de los puertos de montaña de esta etapa reina tendrá como escenario el pabellón de Navia –18.00 horas– y obligará al conjunto que dirige Lino López a ofrecer su mejor versión para contener a uno de los mejores conjuntos del campeonato. Un grupo sólido, construido en torno a cinco o seis jugadoras con nivel más que suficiente para jugar en una categoría superior en la que, de hecho, muchas de ellas ya han militado. Maja Stamenkovic y Davylova en el interior; Rosemarie y Celia García, por el perímetro; y la base, Mariona Martín, conforman esa columna vertebral que ha catapultado al Celta Zorka a la segunda posición.

“Tienen un quinteto que es de los mejores de la competición”, advierte Lino López, consciente de la exigencia de un encuentro que poco tendrá que ver con el que hace unos meses ambos equipos dirimieron con motivo de la semifinal de la Copa Galicia. Entonces, las ferrolanas ganaron de 18 puntos (79-61), una diferencia holgada que, sin embargo, escondió la realidad de un partido correoso, duro y que no se decidió hasta el último cuarto: “Los dos equipos hemos evolucionado bastante desde ese momento”, apunta Lino López.

El grupo olívico afronta el choque con la baja de Ainhoa Lacorzana y la duda de Niski, pero incluso sin ambas son un equipo lo suficientemente solvente para poner en aprietos al Baxi Ferrol. Más con el extra de motivación que supone verse las caras con un favorito hasta ahora intratable. Más que nunca, el Celta afronta uno de esos partidos en los que no tiene nada que perder, pero mucho que ganar. Y, como el conjunto de la ciudad naval lo sabe, no quiere sorpresas. Desde el pitido inicial, como siempre, independientemente del rival que tenga enfrente, el Baxi quiere mandar, llevar la iniciativa, marcar el ritmo que le conviene y con el que se siente cómodo. Un plan de partido que pasa por contener ese peligro interior del Celta y, sobre todo, tener paciencia y seguir el guion para sumar el duodécimo triunfo.