Degustar Fitur, una aventura reservada a los más osados

Degustar Fitur, una aventura reservada a los más osados
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  Degustaciones de productos típicos, demostraciones culinarias en directo y catas de vino, aceite de oliva, cerveza o tequila. Son algunas propuestas para saborear Fitur, aunque para ello hay que estar dispuesto a recibir algún que otro codazo y no desanimarse jamás ante una cola.

Porque ciudades, regiones y países están ávidos de lucir lo mejor de su gastronomía -conscientes de que es una de las principales motivaciones para viajar- lo que atrae a auténticos expertos en comer a costa ajena, incluso en los días en que esta importante Feria Internacional de Turismo está abierta sólo, supuestamente, a los profesionales del sector.

"Cada vez que sale una bandeja la gente se arremolina de una forma impresionante", asegura a Efe una de las azafatas que trabaja estos días en Fitur. Así, la altura de un camarero se convierte en "fundamental para que la bandeja llega a su destino, porque con el brazo en alto no le pueden alcanzar", añade otra.

De ahí que algunas autonomías, como Asturias, hayan optado por ofrecer lo mejor de su cocina en un bar de acceso restringido a empresarios y representantes institucionales. Sergio Rama, del restaurante ovetense La Puerta Nueva, cocina para ellos crema de andaricas, fabada, salpicón de merluza de pincho y arroz con leche, entre otras exquisiteces.

"Sería imposible abrirlo al público. Controlamos la entrada y aún así somos uno de los bares con más éxito de Fitur", explica a Efe el cocinero.

Otros han suprimido las degustaciones. "Había empujones por coger un langostino de la Mar Chica (uno de los mariscos más apreciados de Melilla)", recuerdan a Efe en el estand de la Ciudad Autónoma. Ceuta sólo ofrece una cerveza artesanal de producción local, Ceuta Star, que está refrescando no pocas gargantas. "Muchos piden botellas para llevarse a casa", apuntan.

El País Vasco, uno de los destinos gastronómicos por excelencia, sólo se promociona como tal en folletos. "No hay ni catas ni degustaciones este año. El fin de semana se ofrecerá un pincho-pote solidario, a un euro, y los beneficios irán a una ONG", apuntan a Efe desde su expositor.

Aún así, el visitante dispone de una gran oferta para deleitarse gratuitamente, creciente cuanto mayor sea su picaresca y su habilidad para abrirse paso entre una nube de rivales. Puede comenzar por las catas del Ministerio de Agricultura de productos con DO y seguir con los pinchos que ocho visitantes aprenderán a cocinar junto a cocineros cántabros en el espacio de esta región.

Uno de ellos es Floren Bueyes, que constata a Efe el éxito de esta iniciativa: "En principio teníamos previsto entre 40 y 50 asistentes, pero en cuanto ven salir la comida vienen hacia aquí. Hoy hemos tenido que sacar cien copas en vez de las 30 previstas".

Cáceres, como Capital Española de la Gastronomía 2015, es de visita obligada para los ávidos del canapé, por sus degustaciones diarias que van desde el jamón ibérico Dehesa de Extremadura al gazpacho de picotas del Jerte, entre otras muchas.

Galicia ha recurrido a sus cocineros del Grupo Nove para que preparen ante los visitantes pinchos con productos autóctonos que luego se degustan junto con quesos y vinos de sus cinco DO, y La Rioja a su Cooking Team para ofrecer tapas con un toque de innovación armonizadas con lo mejor de sus bodegas.

Andalucía tiene degustaciones diarias en los espacios dedicados a cada provincia, donde hay que ser muy rápido para disfrutar de una tapa de migas de sémola de Almería o de la alta cocina de dos grandes cocineros gaditanos, Julio Vázquez (El Campero) y Mauro Barreiro (La curiosidad de Mauro).

Además, muchos hacen acopio de botellitas de aceite de oliva jiennense, de salmorejo cordobés envasado en tubo, y de molletes (un tipo de pan) y polvorones de Antequera (Málaga). "Los molletes son un éxito, vienen a pedírnoslos", reconoce una azafata.

Lo mismo ocurre con los brinquinillos (dulces) de Castilla y León, comunidad que este fin de semana -cuando se abren las puertas al público general y las colas se eternizan- ofrecerá charlas gastronómicas, cocina en directo de repostería conventual y el original dúo formado por un violinista y un cortador de jamón, entre otras opciones.

En Castilla La Mancha se podrá disfrutar de catas de vinos y cerveza, degustaciones de jamón y embutidos, quesos y almendras, y en Navarra de miel, de pimientos del piquillo y queso Idiazábal.

Para gustos más internacionales, el destino en este Fitur es Guanajuato (México), Capital Iberoamericana de la Gastronomía 2015. Como tal, despliega a diario platillos como sopa de tortilla, crema de langostinos, machaca con nopales y pollo en salsa verde.

Degustar Fitur, una aventura reservada a los más osados

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