El pasado año pisó la alfombra roja de la Berlinale como parte del equipo de la película “Elisa y Marcela”, de Isabel Coixet. Fue uno de los días más increíbles de su vida. Sofía Oriana Infante fue la encargada de poner la música a un film que narra la historia de dos mujeres que lograron casarse en Galicia en 1901.
El proyecto permitió a la compositora ferrolana (1989) cumplir un sueño: crear para cine y, además, junto a una prestigiosa directora como es la catalana.
En el festival internacional de Berlín, su música pudo ser escuchada por miles de personas. Esta noche, su nombre sonará entre los candidatos al Premio Gaudí en la categoría de Mejor Música Original.
Gala
Será en el transcurso de la gala que desde las diez de la noche se celebrará en el Auditori del Fòrum de Barcelona y con la que la Acadèmia del Cinema Català difundirá y promocionará un año más las mejores películas, artistas y técnicos de su sector cinematográfico.
Infante acude a la cita sin muchos nervios porque, confiesa, “no me espero nada”. Para ella, la nominación es ya todo un logro. “Jamás me habría imaginado llegar hasta aquí; así que esta nominación para mí es ya una recompensa”, asegura.
Autorrealización
Al margen de lo que esta noche suceda en la gala, el proyecto ya le ha aportado mucho, tanto a nivel personal como profesional”. En el primero de los planos, “creo que es fácil de imaginar; una cosa con la que siempre sueñas, trabajar en una película y que además sea con Isabel Coixet es ya una suma de puntos. En este sentido, tengo un sentimiento de autorrealización enorme. También ha sido un altavoz para que me salgan otros proyectos. No puedo estar más satisfecha”, comenta.
Entre los nuevos encargos profesionales que le surgieron a raíz de su trabajo para Coixet señala “Carne”, un cortometraje dirigido por Camila Kater al que puso la música. “Está llevando premios en todos los festivales, está teniendo mucho éxito. Tiene un trasfondo feminista, ya que cuenta historias de mujeres tras diversas etapas de su vida”, explica.
Se trata de un corto de stop motion, de animación, de Cristina Vilches. Ya fuera del ámbito cinematográfico, concretamenten en el académico, el próximo mes estrenará una obra para fagot y electrónica en las Jornadas de Música Electroacústica en Oviedo.
Tesis
En esta ciudad asturiana es donde la ferrolana, que cursó su primera etapa formativa en el Conservatorio Profesional de Música Xan Viaño de Ferrol, se graduó en el Conservatorio Superior para realizar después un máster de composición para cine en Londres.
En la actualidad, y junto a los proyectos profesionales, dedica también parte de su tiempo a la tesis doctoral sobre música e inteligencia artificial en el que estudia y analiza “algunas herramientas, programas de software, que están saliendo últimamente y que intentan componer música como seres humanos”, explica. Pero hoy, frente al estudio, lo que toca es disfrutar de una experiencia que, al margen del resultado final, para la ferrolana ya sabe a triunfo.