La ría recupera la zamburiña como especie comercial de relevancia

La campaña de extracción de zamburiña en la ría se aproxima a su final con el mejor resultado de ventas en lonja desde que la Xunta tiene registros estadísticos oficiales.

Aunque todavía restan dos semanas para que finalice la campaña –que comenzó en abril en el caso de la ría de Ferrol con un plan de explotación conjunto entre los tres pósitos–, se han extraído de los bancos de la zona media de la ría casi 26 toneladas de este bivalvo, prácticamente toda la que se ha capturado en las rías gallegas este año, con la excepción de una cantidad pequeña –53 kilos– en Cambados entre enero y marzo.

Es el mejor dato desde el año 2009, el primero en el que se recogió la venta en lonja de esta especie, en este caso en Vigo, y permite continuar con una tendencia ascendente, pues el año pasado apenas se superaron las 20 toneladas, de las cuales casi dos se comercializaron en las rulas de Cambados y Ribeira.

Historia

La historia de la zamburiña en la ría de Ferrol es tan intermitente como impredecible. El catedrático de Zooloxía Mariña de la USC y director de la Estación de Bioloxía Mariña da Graña, Victoriano Urgorri, recuerda que hace ya varias décadas este molusco era muy abundante. “Historicamente”, explica, “a de Ferrol foi unha ría moi produtiva en zamburiña, pero desapareceu nos anos 90, desde o meu punto de vista sen unha explicación clara aparente”.

Esa ausencia se prolongó durante varios años. “Lembro que no ano 1999, no contexto dunha tesiña, para extraer 75 exemplares tivemos que facer 15 mergullos; hoxe apañas 200 nun par de inmersións”, señala.

Efectivamente, la zamburiña vuelve y, a diferencia de otra especie filtradora como la vieira, no le afecta la toxina amnésica o ASP. Urgorri rechaza que la reaparición de la especie en la ría tenga que ver con la mejora de la calidad de las aguas como consecuencia de la entrada en funcionamiento de la EDAR de Cabo Prioriño, puesto que, subraya, “xa comezamos a percibir a súa presenza moito antes diso”. De hecho, fue en el año 2014 cuando, por primera vez, la zamburiña volvió a despacharse en las lonjas, principalmente en Ferrol. Entonces el saneamiento de la ría estaba en fase inicial.

Nunca antes como este año se había vendido tanta zamburiña en las lonjas. En el caso de la cofradía de Ferrol, por ejemplo, esta abundancia ha permitido generar unos ingresos de casi 160.000 euros, según los datos de la Consellería do Mar, a una media de casi 7 euros el kilo de molusco.

Además, con estas cifras se palian, aunque solo sea muy parcialmente, las consecuencias del peor año de almeja babosa que se recuerda.