Por repercusión mediática, número de participantes y calidad del circuito pocas pruebas hay en el contexto nacional tan prestigiosas como el Descenso Urbano Vila de Sarria. Una competición de la cual el piloto de Ferrolterra Marco Veiga se ha convertido en el dominador absoluto en los últimos años. El local sumó el pasado fin de semana su cuarta victoria en una prueba que congregó a más de 200 “riders” y que movilizó a cerca de 7.000 espectadores en el circuito más extenso del descenso urbano y uno de los más espectaculares.
Un acontecimiento ciclístico de primera magnitud en el que Veiga, que este año no había participado hasta el momento en ninguna prueba, demostró estar en plenitud de facultades y en un gran estado de forma. Y es que, a pesar de la falta de rodaje en competición, el piloto del Ciclos Quintena se mostró intratable desde los entrenamientos oficiales hasta la manga definitiva.
A pesar de que entre sus rivales se encontraban algunos de los pilotos más importantes del panorama nacional, interesados en puntuar para luchar por el título del circuito estatal, Veiga supo jugar sus bazas. Así, arriesgó lo justo en la manga clasificatoria para asegurarse una buena posición de salida y después, en el descenso, voló para, con un registro de 1:32.651, firmar el mejor tiempo de todos los participantes, por delante del pontés Manuel Pellón, del BDM Bike Club, que completó el recorrido un segundo y tres décimas más lento, lo que le valió para encabezar la clasificación máster. Otra local, Alba Cainzos, del Pulpeiros, fue segunda en cadete femenino.