A punto de concluir un año que se preveía catastrófico, la Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao mantendrá finalmente el tipo gracias, en primer lugar, al repunte experimentado por los graneles líquidos –principalmente gas natural licuado y fueloil–, y, en una proyección a medio plazo, también a las expectativas que genera la diversificación, sustanciada en un creciente tráfico de contenedores que recientemente ha sumado una nueva –la tercera– línea regular, ahora con las islas Canarias.
El último informe de Puertos del Estado, el organismo del que dependen las 28 autoridades portuarias de interés general, entre ellas la de Ferrol-San Cibrao, refleja un balance interanual positivo con respecto al mismo mes –en este caso noviembre– del ejercicio anterior. Esta mejoría sobre 2019 solo se ha producido este año –falta conocer el dato de diciembre– en otras tres ocasiones –abril, junio y agosto–, pero en ninguna de ellas la diferencia fue tan amplia como en noviembre, que se cerró con un 49,6% más de mercancías movidas en los muelles de Ferrol y San Cibrao.
Esta evolución positiva, fundamentalmente desde el verano, ha permitido además corregir los datos negativos de comienzos de año, cuando se registraron caídas del entorno del 35% con respecto a 2019. Ahora, con noviembre cerrado, la diferencia se ha reducido hasta el 8,6%, menor que la que presentan hasta 18 autoridades portuarias del sistema general.
Los graneles líquidos, claves
En términos cuantitativos, el segmento de carga que ha contribuido en mayor medida a esta evolución lo constituyen los graneles líquidos, que han encontrado en el gas natural licuado –GNL– y en el fueloil las mercancías con las que el Puerto amortiguará el resultado final del ejercicio. Tanto es así que de todas las dársenas españolas con movimientos de líquidos superiores al millón de toneladas, solo la de Ferrol arroja mejores cifras que el año pasado, en concreto un 34,6% más, hasta superar ya los 2,7 millones.
De este modo se corrige el descenso acumulado de graneles sólidos –no así en noviembre, que mejoró los datos del mismo mes del año pasado–, por encima del 20% a consecuencia, principalmente, de la “desaparición” del carbón con destino a la central térmica de Endesa en el concello de As Pontes.
A esta capacidad de contrapeso de los graneles líquidos se suman las posibilidades a medio y largo plazo que ofrece el tráfico de contenedores. En los once primeros meses del año, este segmento creció más de un 48% –ya se han superado los 11.300 contenedores de veinte pies–, un incremento que hace de la Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao, que preside ahora Indalecio Seijo, la tercera que más aumenta tras las radas de la Bahía de Cádiz y Santander.