El PSdeG tiene en Valentín González Formoso a uno de sus principales valedores. Alcalde de As Pontes desde 2007 acaba de encadenar su segunda mayoría absoluta, es responsable de Política Municipal de la ejecutiva gallega y se perfila como posible presidente de la Diputación Provincial de A Coruña.
Repite mayoría absoluta con un equipo muy similar al que ya estuvo gobernando estos cuatro años –solo hay tres concejales nuevos–, ¿cuáles son las prioridades que establece para los primeros tiempos de este nuevo mandato?
Tendremos que impulsar los proyectos que ya estaban en cartera y que se encuentran en distintos estadios. Nuestra prioridad es intensificar las actividades orientadas a la creación de empleo y, paralelamente, mejorar la gestión urbanística tanto en el casco urbano como en la zona rural. Esos serán los dos ámbitos principales de actuación que nos planteamos a corto plazo.
¿Habrá novedades en la organización interna del Concello?
La continuidad será la tónica, pero es posible que se introduzcan algunos cambios organizativos que sean favorables para el funcionamiento del Ayuntamiento.
¿Cómo de cercana ve la posibilidad de presidir la Diputación?
Es un tema complejo, que depende, según los estatutos, de la ejecutiva gallega, pero contando también con la provincial y la federal para decidir el candidato. Y una vez acordado todavía habrá que establecer las negociaciones con otras fuerzas políticas que permitan al PSOE estar al frente de la Diputación.
Y si llega a ser presidente, ¿dejaría la alcaldía?
Mi compromiso es con los vecinos de As Pontes. Me acabo de presentar a unas elecciones municipales y sería irresponsable decir ahora que delego las funciones de alcalde en otra persona. Ya hay precedentes y de hecho la ley exige, para presidir una Diputación, como mínimo ser concejal, pero también se puede ser alcalde. No sería nada que no esté previsto, lo único que supondría sería un esfuerzo personal tremendo, pero si uno se compromete para tratar de mejorar la sociedad hay que dar pasos adelante.
El PSOE se hará ahora con la mayoría de las alcaldías de la comarca. ¿Cómo valora esta situación como responsable de Política Municipal del PSdeG?
Ha sido un vuelco electoral tremendo, muy ilusionante, una recuperación histórica de la confianza de la comarca en las siglas. Después de estas elecciones habrá en la comarca diez personas menores de 50 años gobernando diez ayuntamientos con el PSOE. Es una situación apasionante, afrontar este reto en la comarca.
Pero también ha habido sombras en los resultados socialistas, como en Ferrol, donde se perdieron dos concejales...
Es verdad. Los números cantan y en Ferrol, y en otros ayuntamientos donde no ha habido una mejoría, las agrupaciones tendrá que analizar con responsabilidad la situación. No nos debemos a nosotros mismos, sino a la gente, y los ciudadanos están lanzando mensajes de que hay que mejorar los equipos y las propuestas y tenemos que ser capaces de hacerlo.
¿Es optimista entonces con respecto a próximas convocatorias electorales?
Ha habido una dinámica de mensaje rotundo por parte de la sociedad al Partido Popular y a las políticas que ha desarrollado, así como a su forma de llegar al gobierno, con promesas incumplibles. Todo lo que signifique PP, en los próximos años, seguramente recibirá un castigo en los procesos electorales. Tendrán que aprender que se necesitan programas realistas, transparente y menos engañosos. Nosotros, los socialistas, tenemos que ser el partido capaz de liderar una alternativa que resulte ilusionante y realista.