Al menos 50 personas murieron en el sur de México como consecuencia del terremoto de magnitud 8,2 en la escala de Richter registrado a las 23.49 horas del jueves, según las autoridades locales, que temían un aumento en el balance de víctimas.

De acuerdo con los datos proporcionados por los gobernadores del sur del país al cierre de esta edición, el movimiento telúrico dejó al menos 35 muertos en el estado de Oaxaca, doce en Chiapas y tres en Tabasco.

Las autoridades advirtieron de que el balance podría aumentar porque había denuncias de personas desaparecidas. El presidente, Enrique Peña Nieto, en su cuenta de Twitter, cifró en 1,85 millones el número de clientes afectados por la caída de la red eléctrica, aunque descartó graves daños en infraestructuras.

Réplicas

En una comparecencia ante la prensa, Peña Nieto aseguró que el seísmo registrado en la noche del jueves es el mayor que ha sufrido el país “en los últimos 100 años”, y alertó de que en las siguientes 24 horas se podría registrar una “fuerte réplica” con una magnitud superior a 7. El Servicio Sismológico Nacional ya confirmó más de 260 réplicas.

La Secretaría de Gobernación –equivalente en México al Ministerio del Interior– declaró la situación de emergencia extraordinaria en 122 municipios del estado de Chiapas. “Se trató de un seísmo de gran escala y de gran magnitud”, afirmó Peña Nieto.

También informó de que se habían suspendido las clases en todos los centros escolares de los estados afectados por el terremoto, para que se pudiesen evaluar los daños que han sufrido las escuelas y los colegios.

El mandatario pidió a los mexicanos que comprobasen la situación de sus viviendas y que, en caso de que viesen desperfectos o fallos en las instalaciones de gas, informasen de lo sucedido a los servicios de emergencias. 

Iglesias, palacios municipales, monumentos turísticos e infraestructuras figuran entre los grandes perjudicados por el seísmo. Juchitán, en el estado de Oaxaca, fue el municipio más afectado por el terremoto. El palacio municipal de este lugar quedó parcialmente reducido a escombros y dejó una estampa peculiar: la bandera nacional en pie entre el derrumbe. El terremoto está entre los de magnitud más elevada registrados en Latinoamérica.

Los diez terremotos más mortíferos de la historia de la humanidad azotaron China, Sumatra, Siria, Haití, Japón e Irán y, en conjunto, suman un total de 2.670.570 muertes, mientras que la mayoría de ellos experimentaron una magnitud por debajo del ocurrido este jueves en México, según datos de la entidad científica americana US Geological Survery.

Por su parte, el Gobierno de España expresó su consternación por el terremoto que asoló el sur de México y, en particular, por las víctimas del seísmo. El Ministerio de Asuntos Exteriores trasladó su “proximidad” a la nación y familiares de las víctimas e indicó que “hace votos por una pronta recuperación de los heridos”. El Gobierno lamentó la pérdida de vidas humanas causada por el seísmo y deseó una pronta recuperación a los heridos. Asimismo, “quiere trasladar al pueblo y a las autoridades de México todo su aliento y solidaridad en estos difíciles momentos”. La Embajada de España y el Consulado General en México, así como los Consulados Honorarios en la región, estaban en contacto con las autoridades locales para conocer la situación de la colectividad española y prestar asistencia consular si fuese necesario. 

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, remitió a Peña Nieto un telegrama para expresarle su solidaridad por las consecuencias del terremoto y sus condolencias por las víctimas. l