11º-18º
viernes | 19 abril | 2024
La Asociación de Empresarios, Comerciantes y Hosteleros (ECHO) de Catabois continúa con su imparable tarea de dar vida al barrio con actividades que sean capaces de atraer no solo a sus vecinos, sino también a los de otros lugares. Es una forma de dar a conocer toda la vida comercial que existe en la zona y, de paso, construir una identidad de barrio asociada a ideas positivas y a una tarea colectiva. Los maios tienen ese efecto, ayudados por la explosión floral y por la inminencia del verano.
Esta fiesta implica a los vecinos, que pueden participar con creaciones individuales o grupales y que tienen un premio pagado en “cataleuros”. Esta es la original moneda de curso legal solo en Catabois, de cambio fijo y creada sin ningún afán financiero-especulador.
Los locales de hostelería y los comercios tienen premios en sus categorías. Cuentan con la promoción de Diario de Ferrol, que les dedica una especial atención en sus páginas dominicales. Esta misma que aquí presentamos es la plasmación escrita de los galardones a la tienda de iluminación Vagalume y al bar Xangal.
La celebración oficial fue el 26 y, además del atractivo innegable de las composiciones florales, contó también con una feria de artesanía y de productos de segunda mano que contribuyó a dar vida a las calles, en un ameno recorrido entre la peluquería La Pelu y la perfumería Candieira.
Otoño de terror
La otra cara de las fiestas populares de Catabois la pone el Samaín. Cinco meses después de la explosión de color y de alegría de los maios llegan la oscuridad y un miedo más bien divertido. La fiesta en estas fechas se desplaza a este barrio y es célebre su desfile de ataúdes a lo largo de la avenida, saliendo desde el cementerio. Hay muertos muy vivos en este recorrido otoñal terrorífico. Y hay quien es capaz de unir las dos fiestas, como hicieron en la tienda de iluminación Vagalume, una de las premiadas en los maios. De acuerdo con el establecimiento vecino, que tenía una calabaza, acabaron haciendo una composición floral con reminiscencias del Samaín.
Vagalume | “Más que los premios, lo importante es atraer a la gente y que vengan a Catabois”
La tienda mejor decorada en los maios de Catabois fue, a juicio del jurado, Vagalume. Blanca Méndez se esmera para mejorar cada año y poner mucho colorido primaveral a su establecimiento, tanto por dentro como por fuera. “Hice flores con cartulinas y con goma-eva para simular rosales en grupos como si estuvieras paseando por el campo. Colgué cestos con flores que caían en cascada”, apunta. “Dentro no uso flor natural pero hacia fuera sí, coloqué unas cañas verdes e hice un corazón grande con flores naturales”.
Méndez recuerda que los participantes en este concurso no son especialistas en arte floral ni en escaparatismo sino aficionados que hacen lo que pueden y se esfuerzan cada año por mejorar. “Vas cogiendo ideas según vas haciendo escaparates. Hacemos lo que nos viene a la mente. A veces lo que surge de forma más espontánea es lo que tiene más éxito. Se trata de que haya mucho colorido y de que se vea mucha flor”.
La tienda de iluminación Vagalume participa en la fiesta de los maios desde que empezaron a celebrarse, hace ocho años. “Tratamos de hacer actividades para llamar un poco a la gente, para atraerlos a Catabois”, apunta Blanca Méndez. “La participación de los comerciantes es buena, aunque es verdad que da trabajo. Más que los premios, lo importantes es que la gente venga”.
Méndez asegura que esta iniciativa ya está consolidada en el barrio, al igual que pasa con el Samaín, una celebración que también convoca a decenas de personas en otoño. “Son fiestas que ya están implantadas. Yo creo que para siempre”.
Xangal | “Nuestro photocall futbolero fue un éxito, paraban los coches para hacerse fotos”
El local de hostelería Xangal ganó el premio en esta modalidad por segundo año consecutivo, que es el tiempo que lleva abierto. El establecimiento que regentan los hermanos María y Juan Sanesteban ha dado con la clave para gustar. En esta ocasión propusieron un maio futbolero. “Nosotros, al ser un bar pequeño, funcionamos muy bien con gente que viene a ver el fútbol, de un equipo o de otro pero con muy buen rollo”, explica María. “Aunque los dueños somos del Barcelona también hay clientes del Madrid así que decidimos decorar así el bar por dentro y poner fuera un ‘photocall’ con dos barriles”, añade.
Y esta idea tuvo una buenísima aceptación entre los clientes, que aprovecharon para sacarse fotos con el original escenario. Pero no solo los caminantes se fijaron en la decoración. También los conductores y pasajeros de los vehículos. “Venían, pasaban con los coches y se quedaban mirando. Algunos aparcaban y preguntaban si se podían sacar fotos”, recuerda María Sanesteban.
El año pasado ganaron el premio con unas cortinas de flores colocadas en las verjas del bar. Para la próxima edición, en la que por supuesto volverán a participar, están de acuerdo en que tocará hacer algo dedicado al equipo local, el Racing de Ferrol, máxime cuando acaban de celebrar el ascenso de categoría. “No sabemos qué haremos, es algo que va surgiendo, pero tendría que ser algo del Racing”.
En el bar Xangal tienen claro que actividades como esta, que rompen con la rutina, ayudan a animar el barrio y a la clientela y ofrecen un beneficio para todos.
