Mario Casas regresa a la televisión con “Instinto”, una serie que se presentó ayer en el Festival de Málaga donde el gallego “se lanza a la piscina”, como explicó él mismo, porque “el calibre” de su personaje le ha supuesto un reto “emocional, físico y sexual” en una serie con mimbres de cine erótico y no esconde ninguna parte del cuerpo del actor.