Entras y tienes una sensación desagradable. La ropa huele mal, las sábanas están pegajosas y el ambiente está cargado. Tu casa ha dejado de ser un hogar acogedor. Pero si la temperatura es buena ¿quién es el culpable de esta sensación?
Está claro: la humedad, o siendo más exactos, la excesiva humedad. Quizás vivas en la costa y ya estés acostumbrado a los altos niveles de humedad todo el año, pero aún así tienes que hacer algo porque la casa es inhabitable y cuando llegue el verano será aún peor.
Además de desagradable, la alta humedad relativa puede ser poco saludable ya que por encima del 60 %, el ambiente generado se convierte en caldo de cultivo para mohos y ácaros.
A los factores ambientales, hay que sumarle también la humedad que generan las actividades cotidianas desarrolladas en el hogar, que contribuyen a que ésta suba por encima de los niveles recomendables.
Por otra parte, la propia humedad generada por las personas a través de la transpiración influye en el aumento de los niveles. Se estima que cada ocupante puede generar entre 40-60 gramos de vapor de agua por hora. Eso supone que una casa con 4 habitantes reciba casi 10 litros de vapor de agua al día.
¿Y cómo podemos reducir la humedad en casa sin dejarnos un dineral en soluciones carísimas? Esta guía te mostrará los mejores consejos que puedes practicar desde hoy mismo.
Os dejamos unos cuantos consejos para reducir los niveles de humedad en tu hogar. El objetivo es tener siempre un ambiente limpio y deshumidificado, para evitar la proliferación de las bacterias, ácaros y todo lo que no es recomendable respirar.
Uno de los trucos más sencillos, cómodos y baratos para regular la humedad en casa, pero que a menudo no realizamos como es debido, es la ventilación. Ventilar favorece que el exceso de humedad que hay en el hogar se expulse a la calle y se recicle el ambiente con aire más seco procedente del exterior.
Con pequeños gestos rutinarios conseguiremos el descenso en el nivel de humedad del hogar. Tender la ropa en el exterior puede ser uno de ellos. La ropa húmeda llega a emitir más de 500 gramos de agua al ambiente cada hora, con las consecuencias que ya conocemos.
El baño es el lugar de la casa donde más humedad se genera y por eso merece la pena prestarle especial atención.
Cuando tomamos una ducha o un baño, una buena parte del agua que utilizamos pasa en forma de vapor de agua al ambiente (hasta 2500 gramos a la hora), con el consiguiente incremento del grado de humedad de la vivienda. Una manera de minimizar este problema es instalando (o utilizando si ya está colocado) un extractor de aire.
Reduciendo el tiempo de ducha conseguiremos emitir menos vapor de agua al ambiente y, además, ayudamos al medio ambiente ahorrando agua.
Otra de las estancias que más humedad genera en una casa es la cocina. El agua empleada para cocinar, al entrar en ebullición se evapora y pasa al ambiente en forma de vapor.
Sabemos que el baño y la cocina son los cuartos donde más humedad se produce. Por tanto, parece lógico que, sobre todo, en los momentos que se está generando el vapor de agua (ducha y cocción de alimentos), las puertas de esas estancias permanezcan cerradas.
Si vivimos en zonas costeras donde la humedad relativa del aire es demasiado elevada, bajarla se convierte en una tarea complicada.
Una de las principales medidas en estos casos es la instalación de un deshumidificador. Este dispositivo es capaz de eliminar el exceso de humedad del ambiente, haciendo que disminuya hasta el nivel que nosotros hayamos programado.
Existen deshumidificadores con una potencia reducida cuya capacidad de extracción es inferior a 1 litro al día, que son óptimos para estancias pequeñas situada en zonas sin mucha demanda. También encontrarás en el mercado aparatos para uso doméstico capaces de retirar hasta 30 litros de agua en 24 horas, suficiente para acondicionar una estancia como puede ser un salón de más de 30 m2 de superficie en zonas con ambientes muy húmedos.
La ventaja de este tipo de aparatos es que no requieren ningún tipo de instalación, con disponer de un enchufe cercano donde conectar es más que suficiente. De esta manera podrás trasladarlo por la casa y ponerlo a funcionar en las habitaciones que más lo necesiten.