El consejo de administración de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), de la que depende Navantia Ferrol, aprobó en su sesión celebrada en la mañana de ayer una inversión para las factorías tanto de Ferrol como de San Fernando que supondrá la entrada en la modernización y conversión de las instalaciones en el denominado astillero 4.0, del que se ha venido hablando constantemente en los últimos tiempos.

La medida, tomada en el último día de la campaña electoral, supondrá para Ferrol la mayor inversión en el astillero de los últimos cuarenta años, tal y como informó ayer mismo el alcalde de la ciudad, Ángel Mato, minutos antes de que se celebrase el propio consejo de administración.

La primera fase de la modernización del astillero está contemplada en los Presupuestos Generales del Estado con 165 millones de euros y servirá para incorporar las tecnologías digitales a Navantia. Mato definió esta noticia conocida ayer como “unha nova esperada, que vai supor o maior investimento no estaleiro de Ferrol dende hai máis de catro décadas”, por eso indicó que el Gobierno de España “está a cumprir cos compromisos con Ferrol, como xa o fixo coas fragatas F-110 e agora volve cumprir aprobando esta obra que suponrá unha moi importante modernización”.

La aprobación de la actuación por parte de la SEPI conllevará la construcción de un taller de subbloques que permitirá la construcción de módulos de mayor tamaño, bloques planos y contará con una línea de volteo y una de láser híbrido, además de disponer de toda la tecnología digital con el resto de las líneas con que cuenta ahora el astillero. Este nuevo taller acelerará el proceso de producción y prepara a Navantia para la construcción de uno de los encargos más esperados, las fragatas F-110.

Además de la actuación en Navantia Ferrol, la SEPI dio también el visto bueno a una inversión de 32 millones para modernizar el astillero de San Fernando, con la construcción de dos naves paralelas y nuevas máquinas, sistemas de elevación y robots.

El inminente inicio de la adaptación de Navantia como Astillero 4.0 ya fue adelantado este mismo verano por parte de la presidenta de Navantia, Susana de Sarriá, en Ferrol cuando participó en la botadura del segundo buque auxiliar australiano, el AOR “Nuship Stalwart”. Fue entonces cuando habló de que el grupo naval público invertiría 160 millones de euros en unos trabajos que emplearían a unas 700 personas de empresas de la comarca y supondría un proyecto con una duración de cinco años que permitirá digitalizar las factorías de cara a la construcción de las F-110.

Compromiso con Ferrol

El regidor local se refirió precisamente a quienes dudaban de que el astillero 4.0 fuese a ser una realidad e indicó que “hoxe –por ayer– a SEPI ás once vai aprobar ese investimento para que Navantia traballe con tecnoloxías dixitais, e por iso animo a Feijóo a que tome nota e que deixe de falar dos problemas e faga algo positivo, que só se fai con investimentos. Hai moitas necesidades e non pode considerar que os problemas en materia industrial non son da Xunta”.

Precisamente preguntado por esos problemas industriales que supondrá la falta de carga de trabajo hasta el inicio de la construcción de las fragatas F-110, el alcalde indicó que “o primeiro que ten que haber é un goberno comprometido como o de agora e os programas de Defensa supuxeron para este país dez mil cincocentos millóns de euros en programas que estaban paralizados e agora están numerosas operacións en curso e nalgunha delas podemos ter éxito –en relación a posibles contratos para Turquía, EEUU o Arabia–”. Indicó además que la carga de trabajo no tendría por qué venir de un AOR y, en ese sentido, explicó que “hai que deixar realizar as accións comerciais nas que se está traballando”.

La noticia de ayer es para Ángel Mato una demostración del “compromiso con Ferrol e o Goberno foi a única administración que se puxo ao mando contra a descapitalización”.