El informe de morosidad del primer trimestre de 2014 detecta un descenso de un día en el período de pago de facturas por parte del Concello con respecto a los tres últimos meses de 2013, ya que se pasa de los 69 días de media que se registraban entonces a los 68 actuales. El concejal de Economía, Alejandro Langtry, destacó que se está avanzando “en el buen camino”, pero anunció un nuevo esfuerzo para continuar rebajando este dato, que está todavía un tanto alejado de los 60 días de plazo que establece la legislación vigente.
El principal problema, según la información facilitada por el edil, se produce en el tiempo que se tarda en reconocer las facturas, es decir, el transcurrido entre la presentación de estas y la certificación del Concello de que efectivamente existe esa obligación económica. Este período está ahora en torno a los 57 días –casi el plazo conjunto legal–, frente a los 11 que demora el abono una vez superado este trámite. Lo ideal, apunta Langtry, es que ambas cuestiones se solventasen en 30 días cada una y este es el objetivo que se persigue. Para ello, se cursarán unas instrucciones internas a los negociados municipales instando a los trabajadores a tramitar con mayor agilidad el reconocimiento de facturas.
“Queda mucho por mejorar”, reconoció el responsable municipal de Economía, que sin embargo apuntó también que ya se han producido importantes avances. Esas circulares al personal municipal se cursarán en breve, pidiendo “más interés y agilidad, porque aunque el día a día de todos es complicado hay que poner encima de la mesa el plazo de pago de facturas y hay que cumplirlo”.
Esta cuestión guarda además una relación directa con la reciente decisión de destinar 500.000 euros de los remanentes de 2013 (el dinero que no se gastó durante el año pasado) al convenio con Defensa para permitir que la estación de radio de Mandiá pase a propiedad municipal.
Como se recordará, en aquella sesión plenaria la oposición hizo constar que para que esta operación pueda salir adelante es necesario estar al día del pago de las facturas a proveedores en el plazo que marca la legalidad, algo que a día de hoy no sucede. Langtry indicó ayer a este respecto que entiende que no habrá problema porque “el espíritu de la ley” es que no se retrasen los pagos por falta de liquidez, algo que en Ferrol no sucede. En cualquier caso señaló que tendrán que ser los informes de la Intervención municipal los que zanjen esta cuestión “cuando corresponda”.