Una docena de alumnos del Instituto Galego de Formación en Acuicultura (Igafa) participaron ayer en unos ejercicios de inmersión a cargo del equipo de Salvamento Marítimo –con base en Vilar do Colo– en el que pudieron probar, tras una semana de lecciones en tierra firma, una de las cámaras húmedas que el equipo de emergencias utiliza en los rescates más peligrosos.
El puerto exterior de Ferrol fue el lugar elegido para esta demostración en la que se simuló el rescate de una persona a varios metros de profundidad. Este dispositivo –del que solamente existe otra versión en Cartagena– permite a los rescatadores sumergirse hasta los 90 metros de profundidad sin la necesidad de utilizar máscaras de aire, gracias al vacío que se crea dentro de la campana, y cuyo flujo de aire se puede regular.
máxima seguridad
Durante el simulacro, que duró unos 20 minutos, dos técnicos monitorizaron en todo momento el proceso, al igual que ocurre en un caso real de rescate, en el que se cuentan con cuatro cámaras para tener el control de todo lo que sucede dentro de la cámara.
Manuel Ruiz, uno de los miembros más veteranos de Sasemar, explicó que se trata de uno de los métodos más seguros para los buceadores cuando se trata de actuaciones de alto riesgo, ya que este dispositivo solo se usa en situaciones límite. n