Echar un vistazo al currírculum futbolístico de Óscar Sielva lleva a ver “El Iniesta de Olot” como uno de sus apodos. “Es que hay veces que Internet miente”, dice entre risas el nuevo jugador del Somozas al ser preguntado acerca del porqué de este apelativo. Lo que es seguro es que el centrocampista tiene experiencia tanto en Primera –jugó cinco partidos en las filas del Espanyol– como en Segunda –disputó siete con el Cartagena–. Incluso jugó más de setenta en Segunda B, incluidos los 34 de la campaña anterior en el Marbella, aunque su reciente paternidad hizo que este ejercicio lo empezase jugando en el Europa –“no me quise mover de al lado de casa”, asegura–, del grupo catalán de Tercera.
En As Somozas, Óscar Selvia, que ayer completó su primera sesión de entrenamiento a las órdenes de Stili, espera ayudar a la escuadra verdiblanca a revertir su situación clasificatoria y, de paso, relanzar su carrera deportiva. Es algo que en la escuadra del Manuel Candocia ya han hecho jugadores como Joseba Beitia o Añón, que aumentaron su cotización tras pasar por el equipo somocense. “Por eso vengo con la ilusión de ayudar en todo lo que pueda”, dice el futbolista, todavía cansado tras el largo desplazamiento que tuvo que hacer desde su localidad natal.
dinámica
Para Sielva, lo primero que necesita el Somozas es cambiar la dinámica actual, puesto que en la actualidad se encuentra en la última posición de la tabla clasificatoria, con solo doce puntos en su haber. “El domingo tenemos el primer partido y hay que tratar de sumar para salir un poco del lugar en el que estamos”, advierte. Por eso, pese a no estar físicamente en su mejor momento, el centrocampista se muestra a disposición del preparador.
El nuevo fichaje del Somozas, que se califica como un jugador más creativo que de destrucción –aunque esta es una labor que tampoco rehúye– ha percibido tras su primera sesión de entrenamiento con el Somozas que “en la plantilla hay gente creativa, de asociarse, de intentar jugar...”. Por eso, a pesar de que no conoce el grupo I, confía en que este estilo sea válido para mejorar la situación clasificatoria en la que se encuentra la escuadra verdiblanca y, de esta manera, empezar a acercarse a las plazas que conducen a la permanencia en el grupo I de Segunda B.