Desde que Sandra Prieto llegó al banquillo del Baxi Ferrol, el equipo ferrolano, incluso en las derrotas, había seguido una línea ascendente que ayer se cortó de raíz ante el Spar Citylift Girona. El cuadro departamental hizo el que probablemente haya sido su peor partido de la temporada en todos los aspectos y cuando esto sucede ante un adversario de la calidad y el “hambre” del cuadro catalán, el escenario siempre suele ser nefasto.
Ayer, la debacle se cifró en los más de cincuenta puntos de diferencia con los que acabó una contienda soporífera que no tuvo historia más allá del minuto cinco de juego. El tiempo que necesitó el cuadro catalán para, sorprendido por un par de buenas acciones del Baxi Ferrol, ponerse el mono de trabajo y desplegar todo su arsenal de recursos, que son mucho y variados.
El Spar Citylift Girona castigó al cuadro ferrolano desde todos los frentes. Cargó en el juego interior, tuvo mucho acierto desde el perímetro, salió en transición con agilidad, movió el balón en estático con precisión. Y así fue estirando y estirando hasta límites que parecían imposibles su renta frente a un equipo que dio la sensación de salir ya a jugar derrotado.
Sandra Prieto confiaba en que no hubiese sido más que un partido. Más vale, porque esta semana el Baxi Ferrol retoma “su” liga, esa en la que necesita sumar victorias a toda costa para engancharse a la salvación. l