Las pruebas médicas a las que se sometieron ayer Nano y Peláez confirman la evolución de la recuperación de sus lesiones, pero no garantizan su presencia en el partido del domingo ante el Logroñés. La resonancia magnética realizada a Nano reveló la existencia de un pequeño edema en las inserciones que hay alrededor de la zona del aductor y el pubis. Sin embargo, las molestias que sufría el exterior herculino son mucho menores que la semana pasada, por lo que ayer fue capaz de completar la sesión de entrenamiento realizada en el anexo de A Malata. Su evolución en los próximos días marcará si se encuentra en condiciones de jugar el domingo, aunque el jugador se muestra optimista al respecto.
Diego Peláez, por su parte, fue sometido a un TAC para comprobar el estado del quinto metatarsiano del pie derecho, que se lesionó la pasada campaña en la Cultural Leonesa y del que se resintió en pretemporada en el encuentro contra el Dubra, correspondiente a los cuartos de final de la Copa Diputación. La prueba realizada ayer descubrió que la fractura sufrida en el mes de abril no está totalmente consolidada, pero que la lesión de hace poco más de dos semanas no agravó el estado del pie. El jugador, de esta manera, esperará a que la inflamación remita poco a poco y, en función de sus sensaciones, estará listo para jugar. Su presencia en el encuentro de este domingo, de todas maneras, parece precipitada, pero se espera que el futbolista pueda estar para el de la semana que viene.
El Racing, mientras, confía en contar con la presencia de ambos jugadores para el encuentro de este fin de semana para, de esta manera, poder completar la lista de convocados si tener que recurrir a alguno de los jugadores que tienen ficha con el Galicia de Mugardos. Pablo Rey, que hoy será sancionado por la roja recibida el pasado sábado frente a la Arandina, es la única baja segura.