Conexión Barbanza

Dos futbolistas de Barbanza, la comarca a la que el Boiro –rival al que el Racing se enfrenta este domingo– representa esta temporada en el grupo 1 de Segunda B, forman parte de la actual plantilla racinguista. Así que para Armental y Joselu, naturales de Ribeira –el primero de la capital, Santa Uxía, y el segundo de Palmeira–, el partido contra el cuadro boirense tiene bastante de especial.

No porque entre Ribeira y Boiro, localidades separadas por poco menos de veinte kilómetros, haya una gran rivalidad –“no hay demasiada”, apunta Armental, mientras que Joselu comenta que “en la zona hay muchos equipos y entre los clubes... no es que haya rivalidad, pero no se ayudan entre ellos”–, sino por la importancia que, a dos jornadas para el final de la liga regular, tiene este encuentro. Para el cuadro verde, porque puede certificar de manera matemática su clasificación para la Copa; para el de Barbanza, porque lo puede condenar, de forma casi definitiva, al descenso o, en caso de que el resultado sea positivo, aumentar sus posibilidades.

Experiencia
Para Armental, además, el encuentro tiene el aliciente de que se va a enfrentar al equipo en el que jugó cinco temporadas –después de iniciarse en las filas del Atlético Riveira, completó su etapa de base en el Aguiño para pasar al Compostela en su estreno como sénior y al cuadro boirense a la siguiente campaña–. “En este tiempo todo el mundo me trató genial y por eso estoy agradecido”. Por eso, partiendo de que su intención es que el cuadro verde gane el domingo, también reconoce que “me gustaría que el Boiro se salvase... pero perdiendo esta vez y ganando la semana que viene”.

De una manera similar opina Joselu que, aunque nunca jugó en el Boiro –salvo una temporada en el Atlético Riveira, él lo hizo siempre en el Palmeira hasta estrenar su etapa como sénior en el Celta B–, reconoce que “siempre gusta que haya un equipo de la zona en una categoría nacional, profesional, como Segunda B”.