11º-18º
viernes | 19 abril | 2024
La Comisión Permanente de Seguimiento del Acuerdo de coalición entre el PSOE y Unidas Podemos se reunió por sorpresa ayer por la tarde en un intento de ambos partidos para cerrar los desencuentros que se produjeron en el Ejecutivo que lidera Pedro Sánchez este semana.
La que fue la segunda reunión de este órgano de control, que se constituyó el 18 de febrero, se celebró ayer a pesar de que en un primer momento estaba previsto que tuviera lugar el día 12.
De esta forma, el Ejecutivo de Pedro Sánchez pretende cerrar así la que hasta ahora fue su semana más convulsa con varios choques entre Ministerios, una visible descoordinación y una ofensiva de Unidas Podemos contra las finanzas del rey emérito que auguran nuevos motivos de división entre los socios.
A la reunión acudieron, por parte del PSOE, el jefe de gabinete del presidente, Iván Redondo; el secretario general de la Presidencia, Félix Bolaños; el subsecretario del Ministerio de la Presidencia, Antonio Hidalgo; el secretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Oliver; la dirección del gabinete de Carmen Calvo, Isabel Valldecabres; y la portavoz en el Congreso, Adriana Lastra.
Podemos estuvo representado por el director de Estrategia y Comunicación de la Vicepresidencia Segunda del Gobierno, Juanma del Olmo; el portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique; y la secretaria de Estado de Agenda 2030 y diputada de Unidas Podemos en el Congreso, Ione Belarra.
La inminente aprobación del anteproyecto de ley de libertad sexual, más conocida por introducir el consentimiento expreso como elemento clave de diferenciación entre una agresión sexual y una relación consentida, fue precisamente el detonante de una semana en la que el Ejecutivo de Sánchez actuó más que nunca como dos gobiernos en uno.
Cuando las diferencias entre PSOE y Unidas Podemos parecían haberse resuelto a favor de los morados con la decisión del presidente, Pedro Sánchez, de iniciar la tramitación del anteproyecto antes de la fecha simbólica del 8 de marzo, Día de la Mujer, todo volvió a saltar por los aires con la difusión por la Cadena Ser de un informe del Ministerio de Justicia lleno de correcciones al texto elaborado desde el departamento de Igualdad.
Otro proyecto de ley aprobado el martes pasado por el Consejo de Ministros, la reforma de la ley de educación, también es foco de división en el seno del Ejecutivo, dado que Unidas Podemos sostiene que no se ajusta al acuerdo de gobierno al no prohibir las subvenciones públicas a centros que segregan por sexos.
El jueves, en cambio, fue Moncloa la que se desvinculó de una polémica guía de recomendaciones laborales frente al coronavirus elaborado de manera unilateral por el Ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz, y que soliviantó a patronal y sindicatos por no haberles consultado antes.
Presidencia del Gobierno se vio obligado a emitir una nota dejando claro que es el Ministerio de Sanidad el que marca las medidas a seguir frente al coronavirus.
No fue éste el único desencuentro del día. La decisión de Unidas Podemos se sumarse a otros grupos en el Congreso para pedir una comisión de investigación sobre las finanzas del rey Juan Carlos abría un nuevo foco de tensión, pues fuerza al PSOE a votar en contra de una iniciativa defendida por su socio.
