Yo no me fiaría

Si yo fuese el PP, no me fiaría de Aznar ni de la repetida tesis de que descarta formar otro partido. Aznar ha tardado muchísimo en hacer una declaración denegatoria, la de Valencia el otro día, con lo fácil que le hubiera sido hacerlo, y con mayor firmeza, desde el instante en que comenzaron las especulaciones. La impresión es que lo de Valencia era para salir del paso. No puede afirmarse que se lanzará a una aventura que costaría cara a la derecha, que quedaría partida en dos. Es dudoso que Aznar quiera evitar una decisión que resultaría catastrófica para el conservadurismo. Pero nada nos garantiza que eso esté del todo fuera de sus intenciones. Hay que preguntarse qué es lo que perseguiría, si no es dar ese golpe definitivo, al sostener esa tensión entre las dos almas del PP.
Más bien me inclinaría a pensar que una decisión positiva es lo que está atesorando en su cabecita, más allá del regusto que le apasiona por retornar al protagonismo. Mucho se habla sobre la situación caótica del PSOE, pero si yo fuese el PP, no me consolaría pensando que tal situación es más grave que la propia, aunque por el momento lo sea. Porque en cuestión de horas podrían cambiarse las tornas si de pronto Aznar anunciase que va a protagonizar la fundación de un partido distinto. Está por ver cuál sería la distribución cuantitativa de las fuerzas conservadoras, pero de momento podría afirmarse que la catástrofe había comenzado. Y tendríamos que valorar enseguida también las reacciones de los partidos de la oposición.

Yo no me fiaría

Te puede interesar