NUEVAS TENDENCIAS DE GESTIÓN PARA ALTOS CARGOS

La firma de Consultoría de negocio y ExecutiveSearch, Odgers Berndtson, presentó el pasado martes 17 de marzo los resultados del informe de los autores Luis Soler y Vicente Segura, junto a José Medina, del informe “La visión de los CEOs(*) 2015-2020: 30 piezas para super-vivir, que recoge los resultados del proyecto de investigación realizado entre más de 300 altos directivos de grandes empresas, de dieciséis subsectores, en un extenso trabajo de campo desarrollado entre septiembre de 2014 y marzo de 2015.
Las veletas son a las encuestas lo que el viento es a las tendencias. Las primeras cambian con el tiempo, cuando el viento las hace moverse por la rosa de marear, y es bueno estar atento e interpretar que la tendencia ha cambiado. Esto pasa en todos los órdenes de la vida, pero ahora: “Lo que viviremos no es una época de cambio, sino un cambio de época”.
Los altos cargos de las instituciones públicas y de las empresas privadas tendrán que humanizarse, para afrontar de forma diferente una etapa nueva en el futuro crecimiento económico. El reto al que se enfrentarán estos profesionales pertenece aotro estilo, con el cual iniciarel renovado ciclo histórico mundial.
El principal reto diferente, que será imprescindible vencer, partirá de un cambio de conceptos en la valoración del nuevo perfil del alto cargo, ahora primaría el estar formado con valores éticos basados en un neohumanismo, es decir: poder infundir confianza en el equipo, controlar la integridad de esas personas, seleccionar talentos brillantes, personas de corazones cercanos sanos y humildes, con cuerpos recios perseverantes y capaces de proyectar una imagen externa de respeto por su honestidad.
Todo lo que destaca el informe es una reacción contra lo realizado desde 2008 hasta el año pasado, en donde las instituciones y empresas requerían líderes que supieran ajustar costes, sin valorar la profesionalidad de los empleados, optimizar procesos con becarios mal pagados, ajustar planillas con despidos masivos y de prejubilados sin amortizar, transformar la organización hacia las ventas con comerciales desconocedores del producto a vender. Era el  perfil de altos cargos deshumanizados, en muchos casos, seleccionados por un nepotismo familiar o de amiguismo del fiel cómplice necesario.
Será necesario transformar las actuales estructuras y modelos desmotivadores, sustituir el cansancio y la falta de implicación, romper los departamentos estancos aislados del interés general, acelerar la pesada velocidad de reacción de equipos ineficaces (causada por la torpe rigidez vertical administrativa), innovar para crear la falta de diversidad por un lado, y por otro eliminar la reiterativa desprofesionalización, romper viajes innecesarios y aplicar las nuevas tecnologías informáticas y de comunicación (TIC).
En definitiva, no será suficiente para el alto cargo con tener un alto grado de titulación universitaria tradicional, necesitará una formación humanística nueva.
El alto cargo que viene ha de tener un perfil con visión de futuro, ser gestor de expectativas y de personas, atento a las demandas de los colaboradores y sobre todo de los clientes, equilibrado, humilde y cercano, amante de la innovación, presente en las redes sociales, cercano a la tecnología, líder de opinión, optimista, creador de un clima tranquilo de buena atmósfera feliz y efectivo, y siempre por su alto conocimiento. Será con todo esto, el que dará la razón de existir a las instituciones y empresas. Lo de trabajar veinticuatro horas quedó atrás, ya que es un sistema que no ha funcionado y es un mal ejemplo para los empleados.
El paradigma de las nuevas tendencias de gestión institucional y empresarial para los altos cargos, se está empezando a definir como un cambio radical en los próximos cinco años. El desenfoque en la selección con sus actuales perfiles está ya caducado y obsoleto. El foco buscará profesionales que además de la titulación universitaria correspondiente, obtengan un certificado de responsabilidad, tras superar un postgrado de Formación Humanística.
(*) CEO significa en inglés Chief Executive Officer, es un cargo gerencial utilizado en las empresas estadounidenses; en español sería algo así como Consejero Delegado o Gerente General, que aquí se denomina como alto cargo.

 

NUEVAS TENDENCIAS DE GESTIÓN PARA ALTOS CARGOS

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