Ferrol, la vergonzosa carencia de una revista de estudios locales

La sociedad actual está cada vez más interesada en conocer la propia historia local, recuperando su memoria cultural y buscando en el pasado sus señas de identidad. Entiende que el conocimiento del pasado enriquece el presente y permite que el futuro conozca sus raíces, dando a conocer, difundiendo y poniendo en valor el Patrimonio Cultural. 
 Son numerosas las revistas de estudios locales que se publican en las ciudades y villas de Galicia. Detrás de ellas suele haber un Museo de la Ciudad, un Centro de Estudios Locales o Históricos y una Biblioteca y/o un Archivo, que constituyen los instrumentos funcionales que les sirven de apoyo.
 Con referencia a la comarca de Ferrol y localidades cercanas, el interés por los estudios locales se refleja en acreditadas publicaciones tales como la Revista de Neda, Cátedra de Pontedeume, Anuario Brigantino de Betanzos, Abrente (Academia de Bellas Artes) y Nalgures (Estudios Históricos), ambas de A Coruña, Estudios Mindonienses de Mondoñedo, Compostellanum (Estudios Jacobeos) y Cuadernos de Estudios Gallegos de Santiago, entre otras revistas que abren sus páginas a variados temas del arte, la cultura y la historia.
 Por el contrario, en Ferrol, aunque se editan algunas publicaciones de variada índole y orientación, no es capaz de consolidarse una auténtica revista de estudios locales, pese a la tradición ilustrada de la urbe, sus numerosas asociaciones culturales, la secular existencia de la Marina y la presencia de la Universidad hace más de veinticinco años. A mayor abundamiento, Ferrol carece de un Museo de la Ciudad y de un Centro de Estudios Locales, que deberían ser los impulsores de una política cultural de carácter estructural, sirviendo además de marco a esta revista.  
 Sin embargo, a principios del siglo XX en Ferrol, al contrario de lo que hoy sucede, eran numerosas y de gran interés las publicaciones de carácter cultural, artístico e histórico que se editaban en la ciudad. Entre ellas deben destacarse dos cabeceras que significaron una notable aportación a la historia de Ferrol y su comarca. 
Se trataba del “Anuario Ferrolano”, dirigido por Nicolás Fort, que fue seguido por el “Almanaque de Ferrol”, dirigido por Leandro de Saralegui, ambos editados en la imprenta de “El Correo Gallego” de la calle Real de Ferrol.
En sus diferentes números, además de sus directores, colaboraron renombrados autores locales y foráneos, casos de Díaz de Robles, Martínez Salazar, Rodrigo Sanz, Andrés Comerma, Justo Gayoso, Alberto Camino, Santiago de la Iglesia, Federico Maciñeira, Manuel Comellas, Victoriano Suances, Emiliano Balás y Aurelio Ribalta, entre muchos otros.
En sus páginas se trataron temas variados relativos a Ferrol y su zona de influencia, como los fueros y privilegios de la ciudad, el arsenal y las fortificaciones del siglo XVIII, la Maestranza del Arsenal, las instalaciones industriales de la Ilustración,  la arqueología comarcal, la etimología y la historia antigua de Ferrol, el monasterio de Xuvia, los castillos de Moeche y de Naraío, el santuario de Chamorro, el voto de Chanteiro, el arco de Fontelonga, las orígenes de A Graña y Serantes, la invasión francesa, la expulsión de los jesuitas, la música tradicional o las canciones populares Además se incluían variadas colaboraciones poéticas, secciones referidas a las efemérides más importantes, biografías de personajes ferrolanos desde Pedro Froilaz a Concepción Arenal, así como una amplia bibliografía relativa a Ferrol.  
Precisamente hace pocas fechas se ha presentado el último número de la Revista de Neda, donde publiqué un trabajo sobre las dos citadas publicaciones, el Anuario Ferrolano y el Almanaque de Ferrol, no solo para dar a conocer su interesante contenido sino para poner de manifiesto la lamentable y vergonzosa carencia actual de una revista de estudios locales en la Ciudad Ensimismada de Ferrol.
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