Esto es lo que hay

No se lo van a creer pero en estas vísperas de turrón, villancicos y comidas familiares lo que destaca es el belén. ¡Se montó el belén!, que decíamos. Y lo repaso para ustedes: unos que salen de la cárcel y otros que les inhabilitan y más allá los que se acercan desde el extranjero de fuera. 

Y todo eso por culpa de Europa que canta la derecha. Y hay más peligros aún: puede tocar un ministro de Hacienda etarra. Ya sería la leche, claro, después del que está ahora en la cárcel, un asunto del que se olvida la presidenta de la comunidad madrileña. 

Y con este “belén” nos aseguran que “el PSOE y el PP avanzan en la negociación pese a las tensiones”, un chiste que yo dejaría para el día 28, que conmemoramos a los Santos Inocentes, en un país lleno de golfos y no hace falta hacer la lista.  

Y ahora qué, dirá usted con toda la razón. Podemos escuchar los gritos, apostar por una solución in extremis o, como dice Andreu Colell, “esperar al día en que para la derecha “batalladora” deje de ser rentable esta situación y al contrario le reste votos. Y es que su actitud recuerda inevitablemente aquel “cuanto peor mejor” que defendía con ardor guerrero Mariano Rajoy.

Pero hay otra vida lejos de las Ramblas y la actualidad se detiene en Ourense donde su alcalde –siguiendo la estela de los Baltar– nombra a dedo ¡faltaría más! a un puñado de asesores que cuestan setecientos mil euros. Y, oh sorpresa, don Francisco Vázquez se une a la tropa de ciudadanos. 
 Hay más: el amigo americano quiere reforzar su flota en Rota con dos buques de guerra y medio millón más de marines para lo que habrá que reformar el convenio bilateral algo ya natural pues de amplió tres veces desde su primera firma allá por el 88 del siglo pasado. 

Y es que después de la OTAN no vino el sí pues el gringo es muy persuasivo. En eso, en persuadir, está el presidente de la los empresarios que no quiere un gobierno que suba el salario mínimo a mil euros que luego los obreros engordan y hay que cambiarles el uniforme. 

Hablando de dinero: según las estadísticas oficiales los jóvenes han sido los grandes sufridores de la crisis. Desde que llegó Mariano Rajoy al Gobierno de España hasta hoy han perdido un 25% de poder adquisitivo. 

Es lo que hay pero, ¿y lo que nos espera?