Las elecciones y la aritmética

El maestro Miguel Angel Aguilar escribía hace unos días un lúcido trabajo titulado “las elecciones y el sistema métrico decimal”, donde, tras explicar que el juego limpio obliga a reconocer que los comicios han sido impecables y a dar la bienvenida a quienes llegan por primera vez sin descalificarles, apunta que la primera reflexión quedaba resumida en un chiste-editorial de El Roto, en el que un personaje afirmaba “nos dijeron a la puta calle y aquí estamos…”
Y están para quedarse, aunque, desde los salones con más “floripondios” y los despachos más importantes, desdeñaron, cuando no ridicularizaron su presencia. El artículo de Miguel Ángel Aguilar sugiere varias reflexiones que me gustaría compartir con ustedes.
Están ahí, entre otras cosas, por culpa de que los que están y los que les precedieron. Están ahí, y el resultado está a la vista, como rechazo a las políticas de la derecha y la izquierda, que durante años monopolizaron gobiernos e instituciones confundiéndose a veces, aunque no son lo mismo. Hace ya muchos años otros jóvenes pedían lo imposible para, al menos, recibir lo justo y otros juraban que debajo del asfalto estaba la arena de la playa en una clara alegoría…
Fue también en mayo cuando los jóvenes del 15-M pidieron una renta básica universal y defender como el primer bien que consagra la Constitución el derecho a la vivienda.
Ahora el profesor Vicenç Navarro, que colaboró en la confección del programa económico y social de Podemos, afirma que hay una bolsa de empleo en los trabajos sociales (recuerda que en Suecia por cada cuatro ciudadanos hay un servidor social y en España no alcanza el uno para diez) lo que supondría mejorar el nivel de vida de miles y miles de ciudadanos dependientes, de jóvenes parejas que necesitan una guardería o personas mayores que precisan una residencia. Por no hablar de maestros y médicos, arrastrados al paro por la política de recortes que padecemos todos y sufren más los que más necesitan.
Ese puede ser un trabajo para un abanico que integre a los partidos desde el centro izquierda –los socialdemócratas– hasta la izquierda real, nacida en la calle y que ahora llama a las puertas del poder.
Y se puede hacer desde la Constitución, pues, como escribió Miguel Ángel, “al igual que el sistema métrico decimal, permite establecer la dimensión de cada una de las opciones concursantes”.

Las elecciones y la aritmética

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