Juguetes y carbones

arece que al PSOE (monárquicos al fin y al cabo), los Reyes Magos de Cataluña le van a traer un jugo de tronos por haber sido buenos, pese a la mentirijilla piadosa de las pensiones a los jubiletas, porque tiene intención de subirlas hasta el IPC. Yo también podría tener la intención de cagarme en los muertos de alguien (incluso superando el IPC), pero voy a pasar. 
A otros como Casado, Abascal y Arrimadas, les van a traer carbones por mentirosos y fuleros, sobre todo por el asunto del Junqueras, la sentencia del Tribunal  Europeo, y “lo” de la Abogacía del Estado, que otra vez terminará en Estrasburgo cuando el Tribunal Supremo se pronuncie, hasta que  no le queden más cojones que dejarle en libertad. Y si no, al tiempo. 
Pero Sánchez no jugará sólo; tendrá como compañerito de juego al Iglesias que, si se llevan bien, ganará una vez uno, y otra vez el otro, si ni se tiran el juego a la cabeza y se lían a hostias, como buenos hermanos. Sabida la intención de los Reyes Magos de Cataluña, la verdad es que la cosa de la sorpresa y la ilusión van a salir malparadas, y quizá los nachos dejen de creer el próximo año en la cosa de los regalos de reyes. Por si acaso, yo le pedí para mí al Rey Baltasar (aunque venga en cayuco por el Mediterráneo), un frasco de colonia Puigdenomt, que huele un huevo de bien a independencia. Y si no la tiene,  una espada láser de verdad para jugar por ahí.

Juguetes y carbones

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