Es la hora del diálogo

En la segunda cita con las urnas en poco más de un mes se han dado unos resultados que denotan que los políticos tienen que comenzar a hablar, dialogar, plantear ideas, soluciones y llegar a entendimientos. El país, con mayúscula, no está para juegos florales, pérdidas de tiempo o enrocamientos como hacen los jugadores de ajedrez. Es el momento de la verdad, de anteponer los intereses de la colectividad, del ciudadano de la calle, a los de los partidos. Es el momento en el que los municipios y las comunidades autónomas cuenten en sus órganos de decisión con los mejores electos que puedan poner en práctica los programas y las iniciativas para levantar el vuelo porque una pesada losa nos amenaza en forma de recesión económica y desaceleración a todos los niveles.

Las urnas en las que hemos depositado el voto en forma de propuestas para los próximos años han hablado y lo han señalado que lo que podría parecer una vuelta hacia atrás, en forma de bipartidismo, se ha diluido sobre con la presencia de otras fuerzas que emergen con fuerza, y algunas que van camino del desagüe por el que se cuelan de los malos gestores.

Los ciudadanos esperamos que los políticos demuestren su capacidad de diálogo y negociación para conseguir unos plenos municipales y gobiernos autonómicos que defiendan nuestros intereses y que respondan, de frente y sin rodeos, a la realidad que vivimos en un país donde la economía sigue siendo el caballo de batalla y el paro el mal que atenaza a la mayoría de los hogares. Y todo ello se consigue hablando, dialogando y poniendo por delante la realidad de la mayoría en todo proceso negociador, frente a los intereses de casta política para defender un puesto laboral tan bien remunerado.  

Llego al final del comentario y me doy cuenta de que soy un ingenuo, un iluso. Los partidos políticos negociarán en base a sus propios intereses de permanencia en los cargos. El resto, lo de hablar, dialogar y negociar, es agua muy pasada. En fin, por desgracia es la pura realidad. Comienza el postureo político ¡Pasen y vean!

Es la hora del diálogo

Te puede interesar