NORMA Y CEREMONIA

Los miembros de las Fuerzas Armadas utilizan, en general (y por simplificar) dos uniformes el de “faena”, conocido en otras épocas como “de campaña o de todo servicio”, y el de gala, reservado para actos oficiales y ceremonias solemnes. 
En el ámbito de la sociedad civil, y salvo en algunos oficios y autónomos, cuando uno trabaja para una empresa, la imagen que proyecta el trabajador de ella es muy importante, porque el cliente la asocia directamente a la de la firma. Por eso, aunque odio las corbatas, yo por ejemplo, la tengo que llevar todas las mañanas “al tajo”, norma que debo de aceptar si quiero mantener la relación contractual que me une a ella. 
Imaginemos ahora que nos invitaran a una boda. Es lógico pensar que si soy uno de los elegidos para asistir a un evento de estas características por mi cercanía afectiva con los contrayentes, no puedo ir de cualquier manera. Procuraré ponerme lo más guapo posible para ellos, ya que quiero con ello contribuir a que la ceremonia tenga el realce y categoría que se merece. A nadie se le ocurriría presentarse a un acto así hecho un fantoche… aunque como dijo el torero al filósofo “hay gente pa tó”
En casa, cada cual puede vestir como le dé la gana, y si uno vive sólo, o si se pone de acuerdo con su pareja, puede ir hasta desnudo. El ámbito privado es el ámbito privado, faltaría más.
Establecidos los límites expuestos que deberían ser omitidos por conocidos y aceptados en una sociedad civilizada, pongámonos ahora en el caso de que ostentáramos la alcaldía de Ferrol. Yo, que soy un amante de los vaqueros, iría a trabajar con estos pantalones sin problema; pero si tuviera que acudir a cualquier acto institucional me pondría un traje ¿Por qué? Porque represento a todos los ferrolanos y las personas que han organizado el acto quieren con mi presencia se dé la debida solemnidad al evento. ¿Y si viniera a Ferrol el Jefe del Estado? ¿le recibiría en plan “casual” no dando la menor importancia a la visita? ¿o me pondría las mejores galas ya que estoy representando ante él a toda la ciudad? Déjenme pensar…