Agosto es un mes clásico de vacaciones en general en España, o al menos es el predilecto de los españoles, para poder desplazarse de un lado para otro, sin preocuparse de nada a su alrededor, solo de disfrutar de sol, playa y campo, además de buenas viandas e hincharse de viajar en cualquier medio de locomoción, el verano es para eso y mucho más y el mes de agosto, es para hacer todo lo que no se hace en el resto del año, por mucho que hagamos, siempre se nos quedará corto, debido a que teníamos que hacer más, pero el esfuerzo en sí, ya es demasiado, y queda uno para el arrastre a final de cada jornada, pero a la siguiente, vuelta a empezar. Siempre hay que ver algo nuevo y distinto y el mes se pasa volando, los gastos se acumulan y las facturas, son algo consecuentes con nuestra forma de vida actual. Inimaginable hace algunos años.
De todos modos, agosto resultó tranquilo políticamente, no hubo alteración en dicha clase y se seguirá de momento hasta finales de septiembre, pese a empezar el curso escolar, la política seguirá en compás de espera, hasta dilucidar el entresijo de quién llevará las riendas de la política en España para formar gobierno.
Hay dimes y dietes al respecto, unos afirman que gobernarán en comandita y otros que no gobernarán, porqué los números no encajan, pese a ser sólo cuatro diputados los que le faltan a los populares, nunca una cifra tan exigua, tuvo tanto valor en estos momentos, como lo está teniendo, de ello depende que gobiernen estos o lo hará el partido de Sánchez. Salvo que las exigencias de unos y el chantaje de otros, se decante por convocar nuevas elecciones generales, que en este caso serían para ir a las urnas a comienzos de enero del nuevo año 2024, toda una plusmarca electoral que duraría, si no hay arreglo, seis meses, para hallar quién dirija los destinos políticos, sociales y económicos de esta nuestra España.
Mientras tanto seguimos de fiestas en la piel de toro, no hay lugar en nuestra patria, que no se celebren fiestas de algún tipo, en todos, salvo los que se hallan abandonados y no tienen gente en su territorio, que desafortunadamente, hay cada vez mayor parte del territorio que se encuentra vacío de gente, debido a la balanza que aflora de salir de un lugar deprimido a otro con más potencial de supervivencia social, de este modo muchos pueblos se están quedando sin gente, debido a que los mayores van desapareciendo y los jóvenes marchan en la procura de mejor futuro.
Pese a todo lo dicho, no faltan problemas en casa ajena, es el caso de Rubiales, que ha dado la de cal y la de arena, y con su proceder personal revolucionó el verano del personal, pese a que la selección femenina de fútbol, logró proclamarse campeona del Mundo, en su duelo frente a Inglaterra, todo un hecho histórico, que quedó empañado por la actitud del presidente de la Real Federación Española de Fútbol y por desgracia sé habló y se habla más de ello, que de la hazaña deportiva de ser dicha selección, la campeona mundial. Fútbol, es fútbol, lo demás es un escándalo, se mire por donde se mire, de tener un verano tranquilo y sosegado, se ha pasado a tenerlo movido en pocas fechas y todavía tiene recorrido el asunto.
En definitiva, este verano, ha sido entretenido en todos los aspectos, tranquilo en política, movido en desplazamientos vacacionales y por último, no podía faltar el postre de tener un evento deportivo de tan alto nivel, con semejante movida a su rededor. No cabe duda de que España, pese a quién le pese, sigue siendo un país diferente.