Desde 1987 ningún alcalde ferrolano ha repetido mandato para poder terminar su proyecto de ciudad, una anomalía que debe ser única en España. El empleo crece con solidez y tenemos ahora 4.368 parados cuando hace pocos años no bajábamos de los 6.000. Tenemos a la vista muchas obras que mejorarán Ferrol, porque se han ejecutado y licitado 37.4 millones de € frente a los 14.6 y 26.6 de los dos mandatos anteriores. Sin embargo, estos logros y otros más no garantizan el éxito político en Ferrol. ¿Tendrá Ángel Mato esa segunda oportunidad? ¿Mantendremos a la ciudad en la frustrante tortura de Sísifo, condenado a subir y bajar la roca por la ladera del monte?  Torrente Gonzalo Ballester decía que Ferrol es una ciudad lógica en un entorno mágico, así que esperaremos que al modo del Big Bang, una fluctuación cuántica rompa esta tradición tan nuestra y podamos avanzar en el espacio y en el tiempo.