Ambas son completamente distintas en su significado y los catalanes usan la primera y no la segunda, sin razón alguna, ya que Independencia, es otorgada a un país que ha sido colonia de otro más poderoso en su momento o está sujeto por una relación de conquista y desea formalizar su plena disposición a ser un estado independiente. Podemos citar como ejemplos, Francia, colonias como Marruecos o Argelia, por España las antiguas Indias Occidentales, es decir los países que conforman la América Latina ó Hispano América, según cada cual, caso de Reino Unido, con la India y países que hoy conforman la Commonwealt, compuesta por 54 Estados. Esto es ser dependiente de un país colonizador y llegado el momento pasar a ser un estado de pleno derecho e independiente.
Este no es el caso catalán, por tanto se viene hablando de una conjugación que no pertenece al caso, el que habría que usar sería simplemente, separatismo, es la único opción que existe real y se ajusta a los deseos de las corrientes políticas extremistas, como ya aconteció en la II República y sus consecuencias, como las más próximas, el malestar de los catalanes, es cosa de lejos, sobre todo de 1702 con la llegada de los Reyes Borbones, en lugar de la Casa de los Austrias, que reinaban hasta entonces.
De todos modos, en Cataluña a lo largo de la historia hubo algunas revueltas que fueron sofocadas por la fuerza, ya que de una forma ú otra siempre pretendieron la secesión de España, cuando fueron parte del Reino de Aragón y más tarde de los Condados Francos, con ninguno encontraron su sitio y siempre estuvieron a la greña, es algo endémico que va con el carácter radical catalán, no es todo el pueblo, solo una parte minoritaria que trae de cabeza al resto de sus ciudadanos y también de los españoles.
Por tanto, el adjetivo que se corresponde con sus exigencias, no es el independentismo que proclaman, no se ajusta bajo ningún concepto a lo que pregonan, sino a un separatismo unipersonal, es decir disgregarse de España en una escisión planeada por sus políticos de tendencia radical republicana a la usanza del presidente Francesc Maciá. Este es su principal objetivo, por tanto se trata de una formación política que desde dentro trata de separar una comunidad o región del resto del Estado español, lo que va contra la Constitución y el propio Estado.
El uso de vocablo independencia, refleja la ignorancia de quienes lo usan públicamente, ya que no queda constreñido a la realidad política del movimiento secesionista.
Hay que emplazarlo por secesionista, que es la clave del problema, Cataluña, no es una colonia de España, sino una región más de su territorio, por esa regla, Galicia, Vascongadas, Castilla ó Aragón, podrían decir lo mismo, sintiéndose colonizados por el Estado español. Y nada hay de cierto en todo esto.