El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, aseguró que no tiene relación con el siniestro aéreo en el que presuntamente murió el jefe del grupo ruso de mercenarios Wagner, Yevgueni Prigozhin, y aseguró que su fallecimiento es "algo bueno" para su país.
"Claro que es algo bueno para Ucrania. No tenemos nada que ver con eso, sabemos quién fue", afirmó Zelenski este jueves en una rueda de prensa en Kiev junto a su homólogo portugués, Marcelo Rebelo de Sousa.
En su declaración, Zelenski aprovechó incluso para hacer una broma al respecto: "Cuando pedí apoyo aéreo a los socios no era esto lo que había pensado", afirmó.
Un avión privado de Wagner en el que Prigozhin figuraba como uno de los pasajeros se estrelló este miércoles por la tarde cuando volaba de Moscú a San Petersburgo y los diez ocupantes murieron en el siniestro, según las autoridades rusas.
Decenas de rusos se han acercado a los centros del grupo Wagner en San Petersburgo y Novosibirsk para depositar flores en memoria del jefe de esa compañía de mercenarios, Yevgueni Prigozhin, cuyo avión se estrelló ayer en la parte europea de Rusia.
Los simpatizantes de Wagner también encienden velas y las colocan en una especie de memoriales improvisados en honor a Prigozhin.
Según imágenes publicadas en redes sociales, un wagnerita se echó a llorar tras depositar flores en Novosibirsk, donde el grupo de mercenarios abrió una oficina en marzo pasado.
El avión privado Embraer donde viajaba el jefe de Wagner se estrelló en la tarde del miércoles en la región de Tver, al norte de Moscú, cuando dirigía de la capital rusa a San Petersburgo.
En el siniestro, cuyas causas aún se desconocen, murieron los diez ocupantes de la aeronave.
Según una de las versiones preliminares, la aeronave, que se precipitó a tierra desde una altura de 8,5 kilómetros, sufrió un atentado con bomba, que estaría escondida en el compartimento del tren de aterrizaje del aparato.
La agencia de aviación civil, Rosaviatsia, informó de que en el Embraer-135 viajaban siete pasajeros, entre ellos Prigozhin y su mano derecha, Dmitri Utkin, antiguo oficial de la inteligencia militar rusa (GRU).
El portavoz de Asuntos Exteriores de la Comisión Europea, Peter Stano, señaló este jueves a propósito del anunciado fallecimiento del jefe del grupo de mercenarios Wagner, Yevgueni Prigozhin, en un siniestro aéreo, que “casi nada de lo que sale de Rusia estos días es creíble”.
“Casi nada de lo que sale de Rusia estos días es creíble, así que hemos visto la información sobre el siniestro aéreo en el que supuestamente” murió Prigozhin el miércoles por la tarde junto a otras personas de su entorno y miembros de la tripulación del vuelo.
“Pero de nuevo, como muchas otras cosas en Rusia, esto es muy difícil de verificar para nosotros, no nos corresponde a nosotros comentar”, indicó Stano.
El líder del partido oficialista Rusia Justa, Serguéi Mirónov, aseguró este jueves que el jefe del Grupo Wagner "estorbaba a muchos". "Prigozhin estorbaba a muchos en Rusia, en Ucrania y en Occidente", escribió Mirónov en Telegram. Según el político, "en cierto momento, el número de los enemigos alcanzó su punto álgido".
Por su parte, el periodista de investigación búlgaro Hristo Grozev, reclamado por la Justicia rusa, pronostica un nuevo golpe de estado. Asegura que gran parte de la sociedad y de los dirigentes militares rusos simpatizaban con Prigozhin e incluso lo veían como el próximo líder ruso. Así, considera que esos círculos "no olvidarán lo que ha hecho Putin con su ídolo y siempre esperarán un momento más adecuado para organizar otro golpe de Estado. Me lo dicen incluso personas de la elite rusa con las que estoy en contacto", dijo Grozev.
Grozev asegura que el suceso era previsible. "Si eres un jefe de la mafia, pero dejas que alguien te arroje un guante sin eliminarlo después, entonces no eres nadie. Por eso Putin debía enviar este mensaje espeluznante a sus oponentes", señaló en referencia a la rebelión protagoniza por Prigozhin y sus tropas el pasado junio.