La Policía Nacional busca a un hombre que convivió con una mujer en un piso de alquiler por habitaciones de Vigo el pasado verano por su presunta vinculación con el cadáver que apareció dentro de una maleta tirada en la calle Espedrigada.

Según fuentes conocedoras de la investigación consultadas por Europa Press, el varón habría alquilado una habitación dentro de este inmueble para vivir con su pareja. Él habría dejado el cuarto en el mes de septiembre, mientras que a ella, de unos 60 años y de nacionalidad española, ya se le habría perdido la pista meses antes.

Por ello, los agentes han realizado un registro de dicho piso, ubicado a la altura del número 83 de la calle Fragoso de Vigo, cerca del lugar donde se encontró la maleta.

Precisamente, vecinos y comerciantes del inmueble habrían alertado hace meses de un fuerte olor, que podría tratarse de un problema en la red de saneamiento. Sin embargo, en los últimos días volvió a repetirse, siendo registrada la pensión.

En dicho registro, se habrían encontrado indicios en un colchón que podrían evidenciar que allí habría ocurrido un hecho violento.

Por ello, ahora la investigación trata de localizar el paradero del hombre que rentó el cuarto junto a la mujer, cuyas características serían compatibles con el cuerpo hallado en la maleta.

De él, nada se sabe desde que el pasado septiembre dejó el establecimiento. La pista de ella se habría perdido ya meses antes. Las mismas fuentes han indicado que se trataría de una pareja toxicómana que se dedicaba a pedir limosna en las calles de Vigo.

Por otra parte, la policía continúa con las gestiones para tratar de identificar el cadáver a través de varios métodos, tanto por su ADN como por la reconstrucción de las huellas, ya que fue encontrado en avanzado estado de descomposición.

Los hechos

Todo ello después de que el cadáver de una mujer apareciese dentro de una maleta la semana pasada en Vigo. Dicha maleta fue hallada por un repartidor en la tarde del jueves, en un solar lleno de maleza, y muy cerca de una vivienda, en la calle Espedrigada de la ciudad olívica.

Al percatarse del mal olor, el trabajador avisó a Emergencias y la Policía Nacional comprobó que, en el interior de la maleta (que estaba envuelta por plástico similar al que se usa para embalar los equipajes en los aeropuertos), había un cuerpo de mujer.

El cadáver se encuentra en muy mal estado debido a la descomposición y los investigadores creen, al ver las condiciones del cuerpo y atendiendo al testimonio de la vecina de la vivienda próxima, que la maleta estuvo allí al menos desde el pasado mes de agosto. La autopsia realizada al cadáver evidencia que recibió una puñalada mortal, lo que confirma la muerte homicida de la víctima.