El teatro Jofre celebra este año el 125 aniversario de su inauguración

El año 2017 será desde el punto de vista cultural muy destacado, no por la actividad que se desarrollará dentro de la programación anual sino por la conmemoración de un hito importante en lo que a espacios culturales se refiere. El teatro Jofre, joya del barrio de A Magdalena y uno de los puntos fuertes de celebración –junto al auditorio de Caranza– de los actos más destacados a nivel cultural de la ciudad, está de aniversario.
El 19 de mayo de 1892 el telón se levantaba en el Jofre para acoger la representación de la obra de Calderón de la Barca “El alcalde de Zalamea”.
Ahora, 125 años después, el teatro mantiene un esplendor que perdió durante parte de su tiempo, hasta su última rehabilitación y reapertura en el año 2005.
El concejal de Cultura, Suso Basterrechea, empezó el año recordando esta efeméride, que contará con alguna celebración especial por parte del área municipal del Concello a lo largo del año que ahora comienza.
La historia del teatro Jofre se remonta a la época de reactivación de los Arsenales y los astilleros ferrolanos, en los que la población requería de un espacio cultural, más allá de barracones donde se realizaban representaciones, para vivir el teatro.
Fue en 1862 cuando un grupo de ferrolanos se pone manos a la obra. Las obras se fueron dilatando, sin embargo, en el tiempo hasta tres décadas y no podrían salir adelante a no ser por el apoyo económico prestado por Joaquín Jofre Maristany, un ferrolano afincado en Buenos Aires que fue el benefactor de la obra, y de ahí que el teatro se bautizase con su apellido, un nombre que todavía conserva. El 19 de mayo de 1892 se levantó por primera vez el telón del Jofre para acoger la representación del Alcalde de Zalamea.

recuperación
A finales del siglo XIX el deterioro el Teatro Jofre se encuentra totalmente deteriorado y con una actividad escénica y cinematográfica muy menguada. El Ayuntamiento de Ferrol decidió comprar el inmueble y proceder a su rehabilitación. Desde 1998 hasta 2005, se sucedieron tres corporaciones antes de que pudiese volver a abrir sus puertas.
El recinto fue adecuado a las necesidades y normativas de los nuevos tiempos pero en ningún caso perdió el encanto arquitectónico del viejo Jofre. Una de las características más novedosas y diferentes del exterior del teatro fue la apertura de una galería en la pared sur del inmueble. Ese mirador sirvió de guiño a la época de esplendor de la ciudad naval, ya que ofrece una panorámica única de la mayor obra hidráulica realizada en el Ferrol decimonónico: el dique de la campana.
La reinauguración del teatro tuvo lugar el 12 de diciembre de 2005, con un acto oficial en el que los ciudadanos pudieron disfrutar de una visita guiada por las instalaciones.