El puerto de Redes acogió ayer la duodécima edición de la Festa da Cabria, una celebración etnográfica que rememora una tradición marinera de la zona como era poner las redes a secar en las cabrias, unas estructuras de madera clavadas al suelo que, entraron en desuso con la llegada de las redes de nailon y que en su momento dieron nombre a la localidad. Precisamente, la organización a cargo de la Asociación Intructiva de Caamouco apostó este año por customizar el evento animando a los asistentes a acudir con pantalón o falda azul y camisa blanca emulando las ropas marineras de antaño.
Las altas temperaturas de ayer se aliaron con la celebración que tuvo lugar a escasos metros del mar y que como en pasadas ediciones incluyó puestos de feria que se completaron con exhibiciones de cestería y encaje.
El acto central tuvo lugar al mediodía con el colgado de las redes en la cabria infantil y posteriormente en la principal, en la que por primera vez participó una mujer –era una actividad vinculada a los hombres tradicionalmente–.
No faltó tampoco la comida popular a base de sardinas en el puerto de Redes donde también se desarrolló una prueba de “xinguir”, un taller infantil de nudos marineros y otro de cuero en un velero fondeado frente a la fachada marítima –este último se llevó a cabo en colaboración con el colectivo Camiño da Artesanía–, entre otras propuestas. l