10º-14º
jueves | 25 abril | 2024
El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Ferrol, en funciones de guardia, decretó ayer el ingreso en prisión de dos vecinos de Carballo, de 22 y 24 años, que fueron detenidos por agentes de la Policía Local de Ferrol en la madrugada del pasado martes, 8 de mayo, tras protagonizar una espectacular persecución que se inicio en la ciudad naval y que finalizó en el municipio de Oleiros.
Por estos hechos, se les acusa de al menos tres delitos, uno de robo con fuerza –también se llevaron un Ford Sierra al que le hicieron un puente–, y dos más contra la seguridad viaria, por conducción temeraria y por hacerlo sin licencia. Los jóvenes comparecieron ante el juez durante casi dos horas y, posteriormente, fueron trasladados –a primera hora de la tarde de ayer– a la prisión provincial de Teixeiro, en Curtis, tras haber permanecido más de 48 horas en las dependencias de la comisaría de la Policía Nacional de Ferrol.
Antecedentes
Ambos individuos son conocidos por las fuerzas del orden de Carballo ya que cuentan con un amplio historial delictivo vinculado con el robo con fuerza de vehículos y establecimientos. Incluso, al menor de los dos se le investiga por un accidente mortal en la localidad el pasado año.
Tras este robo frustrado al estanco del Cantón, que originó la fuga y la posterior detención, la Policía también investiga su posible vinculación con algunos asaltos a establecimientos hosteleros de las comarcas de Ferrol y A Coruña. Tal y como informó este diario el pasado 18 de abril, las fuerzas del orden llevan meses estrechando el cerco a una banda a la que se atribuyen numerosos asaltos a máquinas tragaperras y de apuestas. Ahora, estudian la posible vinculación de estos individuos con esos episodios.
Buscan al tercer asaltante
Los esfuerzos de los cuerpos del orden también se centran en identificar y localizar al tercero de los asaltantes, que continúa huido. Este individuo, cuya identidad todavía no ha sido confirmada, participó en el intento de robo del estanco de la calle de la Iglesia y en la posterior fuga en coche, pero al contrario que sus compinches, logró huir a pie después de que el Seat Ibiza que utilizaron para escaparse se estrellase contra una farola en la zona de Perillo, en Oleiros.
