Mariscadores de Barallobre acusan la escasez de almejas en la ría

Alrededor de una treintena de mariscadores de la Cofradía Santiago Apóstol de Barallobre mantuvieron el pasado miércoles una reunión en la sede del pósito para buscar soluciones al problema de ingresos y de capturas que han denunciado que padecen.
“Tenemos la ría entre la vida y la muerte y hemos llegado a un momento en el que tenemos que tomar una solución por nosotros mismos, ya que nos sentimos abandonados tanto por la Administración como por parte de los pósitos, en donde nadie hace nada por nosotros”, aseguró uno de los mariscadores integrantes de este colectivo, Jorge López.
López indicó además que a los trabajadores les es imposible llegar a los topes. “No tenemos marisco ni en las zonas libres ni en la del banco marisquero y estamos llegando al límite final”, destacó, en relación a las distintas especies de almeja.

Saneamiento
El portavoz de este colectivo también mostró su rechazo hacia “algunas noticias que están saliendo en prensa que van” en su contra. “Nosotros lo que pedimos es que se cuente la verdad, porque está en juego el pan nuestro de cada día”, aseguró López, quien comentó que “una parte muy importante de la ría no está produciendo, por culpa de vertidos, lodos, especies invasoras, además de la sobreexplotación a la que obliga la Conselleria do Mar, trabajando mucho tiempo en el mismo sitio”.
El mariscador explicó que se perdieron muchos bancos marisqueros, poniendo como ejemplos “la zona desde As Pías hasta O Couto, Puntal, Regueiro, San Valentín, Longrás, Maniños, Santa Lucía, A Redonda o el Castillo, lugares en los que ahora no hay nada”. Jorge López manifestó que el colectivo ha “llegado a un límite en el que la gente no hace ni casi para pagar el seguro”.
El colectivo también quiso clarificar que el saneamiento es algo que “viene bien”, ya que “comenzar a sanear la ría es algo muy favorable, pero el problema es que no se puede notar de un día para otro”.
López destacó que, con la eliminación de los vertidos de aguas fecales y pluviales directamente a la zona interior de la ría de Ferrol, se ha logrado “poder vender el marisco en fresco, directamente”. “Pero aquí nadie tiene una varita mágica para, de un día para otro, decir que vamos a tener almejas por todos los lados, algo que dicen los políticos, pero que no es cierto y si es mentira”, comentó.