Juan Flórez Freire

Juan Flórez Freire
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Se distinguió en su larga carrera política por haber sido Alcalde de A Coruña en dos ocasiones y por su continuado trabajo en pro del ferrocarril de Madrid a Galicia. Después de pasar sus primeros años en Ferrol, ingresó el año 1815 en la Escuela de Guardiamarinas del Arsenal ferrolano, saliendo con el empleo de alférez de navío el año 1824.

En ese empleo y en el posterior de teniente de navío navegó en diferentes buques de la Armada por Europa y América, participando en diversas acciones de guerra. Dados sus conocimientos de hidrografía se integró con posterioridad en la Comisión de Planos Hidrográficos, colaborando en la puesta al día y rectificación de los planos de la costa gallega.   


El año 1834 dejó de pertenecer a la Armada, incorporándose al servicio de la Administración del Estado; dado su interés en residir en A Coruña fue nombrado oficial de la Subdelegación de Fomento. El año 1838 pasó destinado como oficial primero y luego como secretario del Gobierno Civil, siendo nombrado más tarde vocal de las Juntas Provinciales de Beneficencia y de Instrucción Pública, así como de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad.

Encuadrado dentro de la ideología liberal y dotado de gran carisma personal, el político ferrolano fue nombrado Alcalde de A Coruña en marzo de 1846, siendo una de sus primeras actuaciones encabezar una suscripción de ayuda por parte de los alcaldes de la provincia para socorrer a los familiares de los muertos en la frustrada revolución gallega de 1846 dirigida por el militar Miguel Solís, un hecho que posteriormente originó los fusilamientos de Carral.


Juan Flórez desempeñó la Alcaldía de la ciudad coruñesa hasta diciembre de 1847. Su reconocida labor fue recompensada con su posterior reelección como alcalde desde mayo de 1851 hasta julio de 1854, fecha en que fue relevado por Juan Montero. Durante su mandato se iniciaron una serie de obras a lo largo de la ciudad, entre ellas el nuevo muelle, el Cuartel de Atocha y el Hospital Militar, mientras se construían nuevas fuentes, parques y jardines. Utilizó con cierta profusión los bandos municipales para el buen gobierno de la urbe.


Su labor asistencial consiguió importantes recursos para el Hospicio y el Hospital de Caridad, propiciando las representaciones de la Navidad por los propios acogidos y creando las bandas de música del Hospicio, a la vez que impulsaba la Junta Municipal de Beneficencia. Entre otras realizaciones también recuperó las Fiestas de María Pita para la atención de forasteros, a las que dio un gran impulso, iniciándose con este motivo en A Coruña las corridas de toros en una plaza de madera construida con este objeto y que se instaló en la calle Juan Canalejo. 

En el año 1854 empezó a trabajar en lo que sería su mayor preocupación futura: el trazado y la puesta en marcha de una línea férrea que uniese a Galicia con Madrid. El año 1856, asociado al ingeniero coruñés Juan Martínez Picavia, Juan Flórez proyectó y elaboró el trazado de un plano de una línea de ferrocarril que uniría Galicia con el centro de la península. Por esta labor el año 1857 Juan Flórez fue elegido diputado  en Cortes por la circunscripción de A Coruña.

Una vez conseguido el apoyo legal a la construcción del ferrocarril a Galicia, a la vez que el de Asturias, bajo el título genérico de Ferrocarril del Noroeste, y una vez sacado a subasta, no se consiguió que se presentase ninguna propuesta de construcción por empresario alguno al no considerarse suficiente la subvención fijada para las obras. Los sucesivos esfuerzos y gestiones de  Juan Flórez, que recibió el apoyo explícito y conjunto en mayo de 1858 de los senadores y diputados de las provincias afectadas por el trazado, consiguió que se acometieron los estudios y trabajos necesarios, aprobándose el trazado del ferrocarril de Madrid a Galicia, que al llegar a Palencia se desdoblaría en una doble línea a Vigo y A Coruña. 

La ceremonia de inauguración de las obras del ferrocarril A Coruña-Madrid, una línea denominada del Príncipe Alfonso, consistió en la colocación de la primera piedra en la capital coruñesa, acto que tuvo lugar en septiembre del año 1858, con la presencia de la reina Isabel II, su marido y su hijo, el futuro rey Alfonso XII. Esta propuesta inicial se vería posteriormente ampliada con los estudios que realizó Juan Flórez del proyecto de tres nuevas líneas de ferrocarril: la que enlazaba Ferrol con A Coruña, pasando por Betanzos, la de A Coruña a Lugo y la de Pontevedra a Redondela, estudios  terminados el año 1865. 


Continuo defensor de los intereses económicos de Galicia, remató su trabajo con el estudio de las líneas de ferrocarril de Ourense a Zamora, de Zamora a Astorga y de Ourense a Vigo. Con respecto a la llegada del tren a Ferrol, como recuerda en una reciente publicación el historiador Guillermo Llorca, no se hizo realidad hasta una fecha tan tardía como el mes de mayo de 1913, bajo el impulso de otro ferrolano, Frutos Saavedra. 


Nombrado académico de número de la Academia de Bellas Artes de A Coruña, y condecorado con las Reales Órdenes de Carlos III y de San Hermenegildo, Juan Fernández Flórez falleció en A Coruña el 2 de septiembre de 1870. La capital coruñesa, en sesión plenaria del Concello presidido por Martínez Fontenla que se celebró el 7 de marzo de 1900, le dedicó una calle de la ciudad para perpetuar su memoria. La calle de Juan Flórez, importante arteria comercial iniciada en la plaza de  Pontevedra, dio su nombre al conocido desde tiempo atrás como Camino Nuevo, siendo actualmente una de las calles más largas de A Coruña.
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Juan Flórez Freire

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