Los socios del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Congreso -Sumar, ERC, Bildu, PNV y BNG- ven incompresible el rechazo de Junts a la ley de amnistía y avisan de que una norma que salió de la Comisión de Justicia sólida, se verá ahora frenada en su urgencia al tener que volver a negociarse durante las próximas semanas.
"Es una jugada incomprensible, pero dicho esto hay que seguir remando y yo creo que al final saldrá", señala el diputado de ERC Jordi Salvador horas después de que el presidente del partido, Oriol Junqueras, criticara que los de Junts no aceptaran una norma que sí daba seguridad jurídica ante los "filtros" que pudiera poner el Tribunal Constitucional.
Y es que, aunque ERC no ha querido entrar en el reproche público a Junts, ayer se sumó a los votos del PSOE y del resto de partidos que apoyan la amnistía. Los republicanos querían zanjar ya una ley, que es de urgencia y que todavía no ha salido del Congreso desde que el pasado 13 de noviembre se registrara, hace más de dos meses y medio.
"Ayer perdimos una oportunidad y JxCat tiene que entender que este mandato necesita estabilidad y que, especialmente Cataluña lo requiere. Necesitamos una ley de amnistía que sea segura, que sea estable y también una mayoría de gobierno que sea responsable", ha remarcado hoy la portavoz de los comunes en el Congreso Aina Vidal.
Sumar no ve en riesgo la legislatura pero incide en que todos deben tener que ceder: "Vamos a tener que hablar, todos nos vamos a tener que mover pero, en cualquier caso, creo que lo más importante es la responsabilidad que ayer faltó", ha reiterado Vidal, mientras la portavoz de Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, hablaba de "traspiés" en la votación de ayer.
Un revés que la formación abertzale espera solventar más pronto que tarde.
En declaraciones a Radio Euskadi Aizpurua cree que "aún estamos a tiempo de revertir la situación" y reconoce que le hubiera gustado que ayer la ley hubiera salido del Congreso rumbo al Senado.
"En cualquier caso confiamos que finalmente se llegue a un acuerdo porque desde nuestro punto de vista, hay mucho más que perder que ganar", señalaba también hoy en la misma emisora vasca el diputado del PNV Mikel Legarda, portavoz en la Comisión de Justicia del Congreso.
Todos coinciden en que lo importante es no hacer descarrilar la amnistía que sí ven que ampliaba las garantías jurídicas a los encausados por el procés.
"No podemos sucumbir a presiones y no podemos aceptar que haya poderes del Estado que marquen el paso a la política", puntualizaba Aizpurua tras advertir que la legislatura durará "en tanto que el Gobierno responda satisfactoriamente a las exigencias de las formaciones independentistas catalanas y vascas".
Lo cierto es que el PNV lamenta que se alargue la negociación de nuevo, aunque en cualquier caso confía que finalmente salga adelante.
Legarda comparte las enmiendas de Junts que amplían los delitos de terrorismo que pueden ser amnistiados y argumenta que firmaron esas iniciativas con una finalidad instrumental.
"Para permitir que las negociaciones no se atascaran y pudieran seguir adelante". De hecho recuerda que pese a apoyar esas enmiendas que fueron el escollo por el que Junts rechazó el texto en su conjunto el PNV votó a favor al considerar que el dictamen estaba bien.
El BNG también apoyó ayer el texto de una ley que había recibido el visto bueno de todos los aliados parlamentarios en la Comisión de Justicia. "Esperamos que pueda volver cuanto antes (al pleno) y que se pueda aprobar", ha dicho el portavoz gallego Néstor Rego en los pasillos del Congreso, que insta a hacer un esfuerzo de diálogo y entendimiento.