El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha avanzado que la Ley de Conciliación que el PP registrará en el Congreso apostará por flexibilidad la jornada laboral y, con ese objetivo, incluirá un banco de horas para que los trabajadores puedan elegir cómo las utilizan para conciliar.
Los 'populares' están ultimando esa norma que quieren registrar en breve en el Parlamento y que quieren presentar a los agentes sociales con el objetivo de recabar su opinión. De hecho, Feijóo tiene previsto arrancar en octubre esa ronda de contactos con UGT, CC.OO., CEOE y Cepyme.
Uno de los apartados de la Ley de Conciliación del PP será la "flexibilidad" de la jornada laboral. Este martes, Feijóo ya abrió la puerta a la semana laboral de cuatro días en "algunos sectores" si se mantiene la misma productividad.
Según el PP, el planteamiento de Feijóo está condicionado al acuerdo entre empresas y trabajadores, "sin margen para la imposición por parte ni del Gobierno ni de ninguna de las partes". Además, está vinculado a aquellos sectores en los que sea posible, han añadido fuentes de la formación.
En una entrevista en Vanity Fair, que ha recogido Europa Press, Feijóo ya anticipa esa posibilidad de poder "trabajar nueve horas al día durante cuatro días a la semana" pero añade que "de momento" prefiere "hablar de un banco de horas y que los trabajadores puedan elegir cómo utilizan por razones de conciliación, y también de una jornada flexible".
"El objetivo a medio plazo es conseguir una España en la que trabajando cuatro días a la semana podamos tener la misma productividad de otros países del mundo, que probablemente también van a ir a ello", asegura.
En el programa electoral que el PP presentó a las elecciones generales del pasado 23 de julio incluía una Ley de Conciliación para "buscar jornadas semanales flexibles y bancos de horas" para "atender las necesidades de conciliación" y "necesidades imprevistas.
A la espera de presentar su norma, el primer partido de la oposición propone desarrollar un banco de horas que permita a empresas y trabajadores flexibilizar los horarios en función de las necesidades de conciliación.
De este modo, la propuesta del PP no se ciñe a un número de horas fijo, como quiere el Gobierno con sus 37,5 horas semanales, sino que en función de las necesidades de la empresa y la plantilla se adapte el horario, pudiendo haber jornadas de cuatro días porque el empleado tiene horas acumuladas que las puede utilizar para descansar.
El banco de horas vendría a desarrollar y mejorar el funcionamiento del actual control horario, que según fuentes del partido tiene en la actualidad unos controles "muy específicos" que impiden la flexibilidad y la conciliación de los empleados.
La idea del PP es exigir a las empresas desarrollar esa flexibilidad con un acuerdo previo entre los sindicatos y la patronal. Una flexibilidad, recuerdan fuentes del partido, que viene recogida en el artículo 34.2 del Estatuto de los Trabajadores: "Mediante convenio colectivo o, en su defecto, por acuerdo entre la empresa y los representantes de los trabajadores, se podrá establecer la distribución irregular de la jornada a lo largo del año", reza el artículo.
La formación de Núñez Feijóo advierte de que cada sector tiene sus particularidades y no puede asumirse una doctrina generalizada para todo el mundo. Por eso, apuesta por un banco de horas que cada empresa de forma "quirúrgica" gestione como distribuir sus horarios con mayor facilidad.
Esta medida, a juicio del PP, servirá también para mejorar la productividad del país, que para los 'populares' es uno de los problemas más acuciantes del mercado laboral. Según la formación, al concentrar el trabajo en picos de mayor demanda servirá para reducir el número de horas trabajadas en momentos en los que no es necesario estar trabajando.
Un ejemplo es el de una asesoría fiscal que tiene que emplearse a fondo los momentos previos a la declaración de la renta de sus clientes, cuando presumiblemente trabajarán más horas de lo habitual. De acuerdo con la propuesta del PP, esas horas que se han trabajado de más luego pueden servir para descansar las semanas siguientes o dentro de unos meses, en función de lo que le venga mejor a trabajador y empresa.
Y es que, desde el PP argumentan que el paradigma laboral ha cambiado y ya no se vive para trabajar, sino que la gente quiere trabajar para vivir y es cada vez más habitual que las personas que se postulan a un puesto de trabajo se interesen, además del salario, por las condiciones de conciliación o el teletrabajo, por ejemplo. En este sentido, el PP enfatiza que la conciliación de la vida familiar y personal se ha vuelto una demanda social "indiscutible".
Para facilitar esa nueva exigencia que quiere el PP, la formación plantea medidas compensatorias para las empresas, como aprovechar los fondos europeos o dar incentivos fiscales si se contratan nuevas personas que estén en paro para cubrir al resto de la plantilla cuando decidan disfrutar de las horas que han acumulado.
Pero el PP hace hincapié en que la medida tiene que nacer del consenso del diálogo social y para ello propone un plazo "cómodo" y que no genere "angustia" por llegar un pacto de manera precipitada, según fuentes de la formación.