Carlos Lesmes formalizará mañana su renuncia como presidente del CGPJ y el Supremo

Carlos Lesmes formalizará mañana su renuncia como presidente del CGPJ y el Supremo

El presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, formalizará mañana lunes su dimisión, según ha informado este domingo el órgano de gobierno de los jueces.
 
En un comunicado, el CGPJ explica que hoy ha acabado el plazo anunciado a los vocales del Consejo "sin que Gobierno y oposición hayan alcanzado un acuerdo para la renovación del órgano de gobierno de los jueces o para la devolución de sus competencias", por lo que ha decidido cesar de inmediato en las funciones que le corresponden legalmente, según ha señalado en una declaración.
 
Lesmes formulará este lunes su renuncia al cargo al amparo de lo establecido en el artículo 588.2 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que será efectiva una vez publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el real decreto correspondiente.
 
En su declaración, Lesmes asegura que después del llamamiento al Gobierno y al PP para que pusieran solución definitiva a la "insostenible" situación del Supremo y el CGPJ y de las exhortaciones en el mismo sentido hechas por el comisario de Justicia de la Unión Europea, Didier Reynders, "los contactos desarrollados estos últimos días, de los que he sido informado, no han dado resultado positivo alguno".
 
"Perdida toda esperanza de rectificación y ante el patente deterioro del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, que no puedo evitar, mi presencia al frente de estas instituciones carece ya de utilidad y sería además contraria a mi propia conciencia profesional", asevera el presidente del Supremo y del CGPJ.
 
Por ello, añade, "se impone mi renuncia como presidente, ya que mantenerme a partir de ahora en esta responsabilidad solo puede servir para convertirme en cómplice de una situación que aborrezco y que es inaceptable”, ha señalado en su declaración.
 
Lesmes solicitará de forma inmediata volver al servicio activo en la Carrera Judicial y se incorporará a su destino en la Sala Tercera del Tribunal Supremo, que ya cuenta con 9 vacantes y que de este modo, ante la próxima jubilación de uno de sus magistrados, podrá mantener al menos por un tiempo el mínimo imprescindible de integrantes para constituir sus secciones de enjuiciamiento.
 
Nadie ha ostentado más años la presidencia del CGPJ ni ha acaparado tanto poder como Carlos Lesmes, cuya salida pone fin a una última etapa muy convulsa en la que personalizó el hartazgo por el bloqueo institucional, con un órdago a socialistas y populares, que nunca creyeron que el capitán saltara del barco.
 
Porque al contrario de lo que sucede con quienes están en la rampa de salida, la recta final de su mandato de casi nueve años será la más recordada. Un ultimátum en directo ante el rey, una dimisión en diferido, un último servicio al Estado (o algunos dicen que al Gobierno) con la renovación del TC y una conjura en el CGPJ donde no gusta el plan urdido por Lesmes para sustituirle.
 
Fuego amigo, dicen sus allegados, que no olvidan que fue Lesmes el que plantó cara al Gobierno de Pedro Sánchez ante las críticas por los nombramientos de altos magistrados con un consejo en funciones, el que verbalizó los titulares más duros contra las reformas del CGPJ, pero también el que elevó el tono contra el PP, por situarse encima de la ley con sus condiciones para renovar un poder del Estado.

 

Al borde del colapso

Se marcha porque dice no poder permanecer impasible ante la incapacidad de PSOE y PP para renovar el Consejo pero defendiendo su actuación, especialmente en sus cuatro años en funciones, pese a que deja el órgano de gobierno de los jueces enfrentado y descabezado.
 
Perdió la cuenta de las cartas remitidas a Congreso y Senado para instar a la renovación y no dudó en paralizar los nombramientos, cuando auguraba un acuerdo entre PSOE y PP que nunca fructificaba y mientras hacían oídos sordos a las advertencias de Europa. Ello le llevó a retomar las designaciones, que algunos cuestionaron por venir de un órgano elegido por un Parlamento de 2013.
 
Ambas situaciones, el bloqueo y los nombramientos, encontraron respuesta en el Ejecutivo de coalición. Primero con una reforma que propuso rebajar la mayoría parlamentaria para elegir a los vocales, que, ante las críticas, Sánchez se vio obligado a abandonar.
 
Luego con otra iniciativa para vetar los nombramientos cuando el CGPJ esté en funciones. Aquí Lesmes echó un pulso al Gobierno. Pidió al Congreso ser oído, aunque sin éxito. Lo mismo ocurrió con la ley que devuelve las competencias al CGPJ para nombrar magistrados para el Constitucional pero no para el Supremo. Se marcha dejando al más alto tribunal camino de la UCI, por las vacantes sin cubrir.
 

Carlos Lesmes formalizará mañana su renuncia como presidente del CGPJ y el Supremo

Te puede interesar