El marcador con el que finalizó el encuentro entre el Baloncesto Narón y el Estudiantes de Lugo (62-93) no hace justicia a lo que se pudo ver a lo largo de los 40 minutos de juego en A Gándara. Solo en el último parcial, los lucenses, que son líderes, fueron capaces de sentenciar un partido que llegaron a ir perdiendo bien entrado el tercer cuarto.
El conjunto que prepara Rafa Fernández da Ponte supo sacar partido a sus recursos. La posibilidad de rebotear y contraatacar ante el desacierto del Estudiantes en la primera parte mantuvo a los naroneses en el encuentro (34-32) y solo el desconcierto local en los dos minutos previos al descanso le permitió al equipo visitante irse a los vestuarios con siete puntos de renta (36-43).
El Narón salió sin complejos en la reanudación y una racha de acierto exterior (tres triples seguidos) lo colocó a tan solo un punto (44-45). Los siguientes minutos fueron un toma y daca del que salió beneficiado el equipo anfitrión, que con una canasta de Cristian García en el minuto 7 ponía a su equipo por delante (56-54). Entonces, un 0-10 de parcial volvió a darle ventaja al Estudiantes, que en el último cuarto, aprovechando la amplitud de una plantilla rápida, física y con talento, sentenció a un Baloncesto Narón que ya no se levantaría de la lona.
En la próxima jornada, el equipo de Fernández da Ponte visita al Betanzos B. l