Lucas Wünschmann Porta: “Me exigí mucho y mejoré en bastantes cosas”

Hace cuatro años el nedense Lucas Wünschmann Porta –2002– pasó de dejar a un lado el fútbol a apostar por el voleibol. Una “jugada” que, hasta la fecha, le está saliendo redonda al deportista local, puesto que el jugador del Aldebarán viene de trabajar con los mejores deportistas de su categoría dentro de la concentración de tecnificación de la Real Federación Española de esta última disciplina. 

El número 13 del Intasa San Sadurniño ha recorrido, durante este breve periodo de tiempo, todas las categorías posibles de la disciplina, disputando incluso varios encuentros de la máxima categoría nacional, Superliga, y dando buena muestra de su potencial y calidad. Unas cualidades que no han pasado desapercibidas para el ente federativo estatal que durante dos semanas ­reunió en Guadalajara a catorce jóvenes promesas de este deporte, entre ellos el de Neda. Una noticia que sorprendió “a medias” al opuesto local ya que “esperaba que me pudieran llamar, aunque sí que me sorprendió un poco”, comenta Wünschmann, “me hizo bastante feliz porque el hecho de que se fijasen en mí para poder venir a entrenar”. 

Y más después de una extraña temporada que, al menos, tuvo un final feliz para el joven voleibolista quitándose así la espina de un ejercicio en el que, por el camino, quedaron sin que pudiese disputarlos el Nacional por Autonomías y las citas estatales por clubes vistiendo la camiseta del Boiro. 

“Esta es una excelente oportunidad para mejorar”, comenta el de Neda, “los entrenamientos son muy interesantes, porque son bastante variados y como son largos da tiempo a hacer bastantes cosas y a trabajarlas”. Y es que, como él mismo cuenta, su día comenzaba a las “09.30 horas con el desayuno y a las 11.30 salimos para el pabellón, en donde entrenamos de 12.00 a 16.00 horas y después volvemos y estamos en nuestras habitaciones, que son individuales. A las 21.30 horas cenamos y después de cenar solemos andar por ahí juntos, cerca del centro. A las 23,.0 horas tenemos que estar en las habitaciones. Nos suelen tomar la temperatura por la mañana, por el coronavirus”. 

Regreso
Y así fue su rutina durante las pasadas dos semanas, en donde también tenían tiempo para ver las sesiones de trabajo de los absolutos convocados por la Federación. 

Unos entrenamientos en donde Wünschmann fue notando, día tras día, “que estuve mejorando en bastantes cosas y me exigía bastante a mí mismo”. Y todo ellos después, cabe recordar, de un confinamiento y sin poder volver a entrenamientos con su equipo. “Los primeros días costaba un poco, pero después ya me acostumbré”, indica el del Aldebarán respecto a su regreso a la pistas. Una vuelta que recibió con muchísimas ganas y en la que, además, pudo estar acompañado por el que fue su técnico hasta la pasada campaña, el herculino Charly Suárez –que participó como entrenador invitado–. “Estaba bien tener una cara familiar cerca”, comenta Wünschmann, “me dio algún que otro consejo, pero el que nos estuvo corrigiendo era el técnico principal, –Carlos Carreño–”. 

Equipo 
El de Neda todavía no ha podido conocer al que será su nuevo preparador, el argentino Hernán Pesci, si bien espera que la pretemporada con sus compañeros dé inicio como viene siendo habitual, a principios de septiembre –el inicio de la competición está previsto para el 17 de octubre– “y pienso que sí se podrá. Tomando las mismas medidas que se toman aquí, no habrá problema”, señala. 

Un nuevo ejercicio para el que el de Neda ve a su equipo “bien, está fichando bien. Este año la temporada será algo más corta porque hay tres grupos y pienso que en el nuestro podemos quedar entre los tres primeros”, indica, viendo a la formación de Dumbría –segundo el pasado año con los mismos puntos que el ascendido Boiro– como uno de los rivales a batir. Una quiniela que sabremos en marzo si el canterano local acierta.