Gómez Noya da su nombre a un módulo de Teixeiro

 Valores del deporte como el juego limpio, el esfuerzo constante y, sobre todo, el respeto por igual para compañeros y rivales pueden aplicarse a muchas áreas de la vida. Y si alguien ejemplifica esos valores de dedicación, sacrificio y comportamiento ejemplar es Javier Gómez Noya, al que el Concello de Ferrol homenajeó dando su nombre al complejo deportivo de Caranza y que este verano se proclamó subcampeón olímpico de triatlón.

Pero desde este mes de diciembre, el nombre de Gómez Noya dejará de significar únicamente éxitos en el deporte, sino que se ampliará también a los logros personales tras ser nombrado en la cárcel de Teixeiro un Módulo de Respeto en honor del triatleta local. El deportista no solo ha manifestado sentirse más que contento de este homenaje, sino que estuvo en el penal para la apertura de estas instalaciones con su nueva denominación. Gómez Noya compartió con ellos la que definió como “una gran experiencia” y recibió allí los aplausos de un colectivo que le demostró su admiración.

concepto

La finalidad de los llamados Módulos de Respeto es lograr un clima de convivencia y de máximo respeto entre los residentes. En ellos, idealmente hablando, el interno deja de vivenciar esta área y sus normas como “algo impuesto” para considerarlo como “algo propio”. Esto se consigue fundamentalmente facilitando su participación en la vida diaria, las tareas y las decisiones que se adoptan en el módulo, a través de grupos de trabajo y comisiones de reclusos. El módulo “Gómez Noya” será ahora, por tanto, residencia para aquellas personas que quieran hacer de la filosofía del ferrolano, trabajo y respeto a los otros, su forma de vida mientras acatan su sentencia y también después.