Empieza hoy diciembre, el último mes del año, que al Racing le depara cuatro partidos que determinarán en qué posición hace frente a 2023. Dos derbis gallegos y tres partidos frente a rivales que ahora mismo están en puestos que clasifican para el playoff de ascenso a Segunda componen el menú que le espera antes de marcharse de vacaciones. Además de poner punto final a la mala racha de resultados en la que está inmerso, con él espera el equipo ferrolano recuperar las buenas sensaciones que en el tramo inicial del campeonato le hicieron estar en liderato del torneo cuatro jornadas.
El estadio de Pasarón será la primera parada de un mes en el que el Racing jugará dos partidos como local y otro dos como visitante. Por lo menos se trata de los dos viajes más cortos del campeonato –los que realizará a Pontevedra y A Coruña–, así que el desgaste derivado de este aspecto no será excesivo. Pero el nivel futbolístico de los adversarios que el equipo ferrolano tendrá enfrente, bien por su situación clasificatoria bien por ser duelos de rivalidad, anuncian dificultades para el cuadro verde.
Con el encuentro contra el Pontevedra empieza también la única semana de la temporada en la que hay tres partidos. Porque, al margen del que jugará este domingo, el cuadro verde recibirá el miércoles al Linares y el domingo visitará Riazor para jugar contra el Deportivo. El último choque de este mes será el que lo enfrente al Alcorcón, actual segundo clasificado del campeonato.
De cómo salga el Racing de este mes de diciembre dependerá con qué objetivos hace frente al año 2023. Al menos, lo que el equipo ferrolano espera es romper la mala racha de resultados en la que se encuentra y que lo ha hecho caer hasta la sexta posición.