Camila Alonso prueba sus fuerzas en Montevideo

 

Fue tan provechoso el último aliento de 2016, que Camila Alonso no quería que acabase la temporada. Su victoria en la Copa de África en Agadir y en el Triatlón de Santo Domingo o la decimotercera posición en la Copa del Mundo de Corea hicieron que la triatleta ferrolana de adopción olvidase todos los problemas físicos que la habían amargado meses atrás. Un trampolín moral que le ha permitido asumir con intensidad y devoción el trabajo de pretemporada y que ahora la hace encarar con confianza su concurso en el Campeonato Iberoamericano de Triatlón, que el domingo se disputa en Montevideo.

Una cita con un sabor especial para la deportista del Triatlón Ferrol que, además de querer demostrar que ese final de 2016 no fue un éxito efímero, aspira a revalidar el título en una competición que la coronó en La Habana hace poco más de doce meses. Ahora, Alonso vuelve con más fuerza que nunca y lo hace como la única deportista española seleccionada por la Federación para el evento. Una cita que se desarrollará en distancia sprint –750 metros de natación, 20 kilómetros de ciclismo y 5 de carrera a pie– en las inmediaciones de Playa Ramírez, en la capital uruguaya. En las aguas del arenal y en las carreteras y paseo marítimo que lo circundan se desarrollará una carrera que reserva alguna rampa “exigente” sobre la bicicleta.

Poco más de una veintena de deportistas, en su mayoría de seis nacionalidades optan a la victoria en esta primera gran cita de la campaña para la menor de las hermanas Alonso. La mayoría de ellas, brasileñas y argentinas, aunque sobre el papel será la mexicana Adriana Barraza su máxima adversaria de cara al triunfo. La centroamericana, comparte con la propia Alonso un objetivo común a cuatro años vista: la clasificación para los Juegos Olímpicos de Tokio.

La cita, una de las dos programadas en la jornada, se disputará el domingo a las dos de la tarde en horario peninsular.