No fue un partido común de Copa Galicia ni de pretemporada. El duelo que ayer se pudo ver en el pabellón de A Malata fue un auténtico espectáculo. Y no por el abultado marcador ante el Maristas herculino (102-61) con el que terminó, si no por el regreso del Baxi a su pista y, asimismo, de su incondicional público.
"Ha sido una sensación diferente y da gusto volver a disfrutar de la afición, la verdad creía que no volvería a pasar", comentaba el preparador local Lino López al término de un encuentro de Copa Galicia en el que la diferencia física y de calidad en el juego quedó patente desde los primeros minutos. Y si bien la primera canasta en el prácticamente “lleno” pabellón local –acudieron más de 200 de los 300 aficionados permitidos– fue para las herculinas, y aquí se quedó su renta, abrumadas por la defensa y el ritmo ferrolano que poco les dejaba hacer.
Dueñas y señoras del balón y de todas las facetas del juego, y dando minutos a todas las jugadoras –saliendo de nuevo a pista la cadete Carla Peña, con un punto, y la juvenil Sonia Bra, con dos– el marcador fue creciendo con aportaciones de prácticamente todas las ferrolanas –incluyendo triples Irene Gari, Boquete, Patri o Natalia–. Con un 52-33 al descanso y 79-44 en el tercer cuarto, la emoción se quedó en la grada, con un público que aplaudió mucho a las suyas en su regreso, preparándose para el inminente inicio liguero.