Ares pone rumbo a la elite

Cuando perdió la categoría prometió volver y este fin de semana, doce meses después de decir adiós a la ACT, la trainera del Club de Remo de Ares   disputa el play-off de ascenso para entrar de nuevo en el selecto grupo de entidades que disputan la Eusko Label Liga. Es el tercer año consecutivo que la “Santa Olalla de Lubre” disputa esta promoción desde que en septiembre de 2016 una competición de estas características la catapultase a la elite del banco fijo nacional y, aunque poco tiene que ver la situación de entonces con la de ahora, los aresanos confían en que esa experiencia juegue en su favor, al menos para templar los nervios que esta misma campaña los han atenazado en algunos momentos. 
Durante el último verano, la tripulación capitaneada por Agustín Fernández ha protagonizado un mano a mano con Samertolameu y, aunque han estado muy cerca de ellos en muchas ocasiones, los de Meira han sido los grandes dominadores del campeonato doméstico. En una campaña en la que la tripulación aresana se ha tenido que acoplar a una nueva trainera, su rendimiento ha ido de menos a más y, aunque afronta el play-off “de tapado”, su entrenador y patrón no duda en que llegan en el mejor momento de la temporada. 
Junto con las dos escuadras gallegas, San Juan, penúltimo clasificado de la Eusko Label Liga; y los dos mejores de la ACR, Astillero y Lekittarra Elecnor de Isuntza, dirimirán este play-off de ascenso. Lo harán en dos jornadas intensas, mañana sábado en Bermeo y la mañana del domingo en Portugalete, en la ría del Nervión, coincidiendo con las dos últimas jornadas de liga y la resolución de la Corona Caixa Bank de la máxima categoría. En ambos escenarios, las cinco traineras que pelean por las dos plazas de ascenso se medirán en dos pruebas contrarreloj. La puntuación obtenida en ambas jornadas determinará la clasificación final.
Visto el rendimiento de Samertolameu y Astillero en las competiciones gallega y vasca, ambos parten como favoritos pero, por propia experiencia, en Ares saben que lo sucedido en los últimos meses poco importa. Cuando hay que dar la talla es a partir de mañana. l