11º-22º
sábado | 20 abril | 2024
El espíritu olímpico volvió a invadir ayer el campo de Lamas, en la parroquia ortegana de Couzadoiro, para albergar la octava edición de las Olimpiadas Rurais, organizadas por la asociación vecinal del lugar, en colaboración con el Concello de Ortigueira.
Las buenas condiciones meteorológicas que reinaron durante toda la jornada, así como el completo programa de actividades diseñado por la AVV O Couzadoiro, garantizaron el éxito de la convocatoria, que regresaba este año tras el parón obligado por las restricciones derivadas de la pandemia del covid 19.
El día comenzó a las 12.30 horas con la misa y ofrenda floral a la virgen de Loreto en la iglesia de San Cristovo, para continuar, sobre la una y media del mediodía, con la música de Lidia India entre los manzanos.
El “xantar” popular, con menús por encargo, congregó a múltiples vecinos de la parroquia y a otros llegados desde municipios limítrofes, como el de Mañón.
La jornada olímpica comenzó sobre las cinco de la tarde con las tradicionales competiciones de carreras de carretillas, subida al eucalipto, tiro de cuerda, corte con tronzador o lanzamiento de cestos de paja; algunas de las modalidades con las que contó esta prueba popular en la que se mezclaron las ganas de disfrutar y el humor.
Simultáneamente tuvieron lugar también las competiciones de la categoría infantil, que en este 2022 alcanzaron su quinta edición.
Una vez finalizadas, sobre las ocho de la tarde, se procedió a la entrega de premios a los ganadores de cada categoría para, a partir de las nueve, continuar con la jornada festiva con el reparto de la cena, a base de empanada vegana y callos.
Diego de Braelle y su banda fueron los encargados de poner el broche final a la octava edición de las Olimpiadas Rurais de Couzadoiro, a través de un concierto que los asistentes pudieron disfrutar bien entrada la noche, a partir de las 22.30 horas.
